Las extremas temperaturas que está sufriendo toda España como consecuencia de la segunda ola de calor de 2022 se están notando especialmente en Andalucía y Extremadura, donde el suelo, literalmente, está ardiendo.
El satélite Copernicus Sentinel 3 ha registrado hasta 60 grados de temperatura en algunas superficies en tierras andaluzas. En Sevilla, Córdoba y Badajoz se espera que la temperatura ambiente supere los 45 grados.
En zonas con poca vegetación, sin apenas arboledas, y en algunas áreas urbanas, es donde se están registrando temperaturas más altas en el suelo. Al no haber muchas nubes, el sol calienta muchísimo la superficie, que es la que transmite el calor al aire. Cuanto más caliente está el suelo, más calurosa es la masa de aire que tenemos.
La Agencia Estatal de Meteorología considera que "lo más probable es que la ola de calor se prolongue durante el fin de semana y que no sea hasta el lunes 18 cuando se inicie un descenso de las temperaturas que empezará por el oeste peninsular".
En Sevilla, a partir de este miércoles, se activará la alerta roja por el calor extremo. Desde el proyecto proMeteo Sevilla se ha pedido que se extremen las precauciones y cuide a las personas más vulnerables, ya que la actual ola de calor tiene riesgos elevados para la salud. La exposición al calor extremo puede provocar deshidratación, mareos, agotamiento, insolación, pérdida de conciencia y otras emergencias médicas.