La Audiencia de Cádiz, con sede en Algeciras, ha condenado a un guardia civil a seis años de prisión por un delito de blanqueo de capitales agravado, procedente del tráfico de drogas, y le ha impuesto una multa de 4.500.000 euros. Además, ha sido sentenciado a un año de cárcel por pertenencia a grupo criminal. La misma sentencia condena a sus dos hijos como cooperadores necesarios en el blanqueo, a dos años y cinco meses de prisión cada uno, con una multa también de 4.500.000 euros, y a ocho meses de cárcel por pertenencia a grupo criminal.
Según la resolución judicial, se considera probado que el cabo de la guardia civil, junto con su familia, creó una estructura económica, societaria e inmobiliaria con el objetivo de blanquear capitales procedentes del narcotráfico. Esta estructura estaba compuesta por doce empresas y cuatro uniones temporales de empresas, destinadas a participar en licitaciones públicas. La sentencia detalla que, en total, se realizaron aportaciones dinerarias por valor de aproximadamente 730.000 euros para la compra de capital social, y se adquirieron bienes inmobiliarios por un mínimo aproximado de 606.000 euros.
Además, la sentencia destaca que la mayor parte de la financiación de esta estructura se realizó mediante una compleja red de préstamos privados o capital de terceros, con un valor aproximado de 997.000 euros. Estos préstamos, a pesar de su apariencia legal, son considerados por el tribunal como pagos encubiertos, realizados con dinero en efectivo cuyo origen se intentaba ocultar.
El fallo judicial detalla las adquisiciones inmobiliarias y de bienes de lujo, como coches de alta gama, realizadas por el cabo o las empresas administradas por sus hijos. También menciona los numerosos viajes al extranjero de toda la familia, con estancias en hoteles de lujo, que no se reflejan en las cuentas bancarias y que no se corresponden con los ingresos declarados por los miembros de la familia. Asimismo, no se justifica el origen del dinero utilizado para pagar fianzas de hasta 80.000 euros cuando los hijos fueron detenidos.
La Audiencia considera que los hijos del guardia civil actuaron como cooperadores necesarios en el blanqueo de capitales. De esta forma, el tribunal rechaza los argumentos de la defensa, que intentaron exculpar a los hijos argumentando que todas las decisiones financieras y patrimoniales fueron dirigidas exclusivamente por el padre, y que ellos solo figuraban en los documentos debido a la incompatibilidad del guardia civil para gestionar empresas.
La sentencia subraya que los hijos eran plenamente conscientes de la irregularidad de las actividades económicas y financieras dirigidas por su padre. Pese a ello, en lugar de apartarse, facilitaron activamente estas operaciones, participando en la creación de un entramado societario que permitió el blanqueo de capitales. El tribunal sostiene que sin su cooperación, el delito no habría podido llevarse a cabo.
En este sentido, la sentencia refleja que la implicación de los hijos en el esquema financiero ilegal fue esencial para su éxito. A pesar de las evidentes señales de alarma, como la detención e ingreso en prisión de su padre, los hijos no solo no se distanciaron de estas actividades, sino que contribuyeron de manera decisiva a su continuidad.
Finalmente, la Audiencia de Cádiz concluye que la actuación conjunta del guardia civil y sus hijos permitió la creación de una estructura compleja destinada a blanquear grandes sumas de dinero provenientes del narcotráfico, lo que justifica las severas penas impuestas a todos los implicados en este caso.