La plantilla de Iryo culminó la primera semana de huelga con una concentración frente a la sede de la compañía, en una jornada marcada por un respaldo mayoritario a la movilización. Según el Sindicato del Sector Federal Ferroviario de la CGT (SFF-CGT), el apoyo a la protesta volvió a crecer durante el jueves, superando incluso los niveles del día anterior y mostrando que la paralización se ha ido consolidando pese a los elevados servicios mínimos impuestos.
La tercera jornada dejó 18 trenes suprimidos, una cifra significativa teniendo en cuenta que los servicios mínimos superan el 70% en todos los trayectos. Para el sindicato, estos datos evidencian la fortaleza de una plantilla que, aun con fuertes limitaciones, mantiene la presión sobre la dirección en pleno conflicto laboral.
Tres días de paro con un mensaje directo a la empresa
El SFF-CGT explicó que el seguimiento fue mayoritario en todos los territorios y entre todo el personal con capacidad de secundar la huelga. En Barcelona se mantuvo un 99% de apoyo, mientras que en Madrid el colectivo de mantenimiento volvió a registrar un respaldo prácticamente total. También el personal de tripulación elevó su participación hasta el 87%, una subida que el sindicato interpreta como síntoma del “creciente desgaste y hartazgo” entre los trabajadores. En Málaga, Sevilla y Valencia, el seguimiento repuntó igualmente respecto a la jornada anterior.
Entre los elementos que han alimentado este clima de malestar destaca la celebración organizada por la empresa en un hotel de cinco estrellas de Madrid con motivo de su tercer aniversario. Desde el SFF-CGT señalaron que “es inadmisible que, mientras la plantilla está peleando por su futuro, la dirección celebre un evento de lujo ajeno a la realidad laboral”, una crítica que ha servido para reforzar el sentimiento de agravio entre los empleados.
La plantilla reclama avances reales en el convenio
Tras tres días consecutivos de huelga, el sindicato sostiene que la negociación del I Convenio Colectivo no puede seguir bloqueada. La organización subraya que “la empresa no puede ignorar tres días de huelga consecutivos. El conflicto no va a desaparecer por inercia. Iryo debe sentarse a negociar con propuestas reales”. Para los representantes laborales, el respaldo obtenido muestra una plantilla cohesionada frente a la falta de avances.
El SFF-CGT advierte además de que, si la empresa mantiene una postura inmovilista, podría intensificar las movilizaciones durante la campaña de Navidad. La plantilla, insisten, ha demostrado su compromiso y determinación para defender unas condiciones laborales dignas. La organización concluye recordando que “Iryo celebra su tercer aniversario; la plantilla celebra que ya no está dispuesta a aceptar más excusas. El futuro de la negociación está ahora en manos de la empresa”, un mensaje que resume el clima de confrontación de esta primera semana de paros.
