Una atracción infantil decorada con motivos rocieros está generando una intensa polémica en redes sociales por reproducir el movimiento del paso de la Virgen del Rocío durante la Romería. El cacharrito, que funciona como un pequeño columpio mecánico, permite a los niños balancearse de forma muy similar a la que realizan los almonteños cuando portan la imagen, mientras suena de fondo la Salve Rociera, según puede apreciarse en los vídeos difundidos.
Reacciones encontradas y críticas de Abogados Cristianos
En uno de los vídeos compartidos se observa a dos menores montados en la atracción, que avanza imitando de manera evidente el movimiento tradicional del paso de la Blanca Paloma, lo que ha suscitado opiniones enfrentadas entre los usuarios. Mientras algunos consideran que se trata de “una maravilla” y que es “muy bonito que desde pequeño se pueda tener una experiencia similar a de la Virgen”, otros lo han valorado como una “falta de respeto” o “algo que no tiene nada de gracia”.
La portavoz de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, expresó su indignación en el programa El tiempo es justo, donde calificó la atracción como una propuesta ofensiva. Castellanos afirmó que “me parece ofensivo, me parece de muy mal gusto e innecesario”, una postura que ha contribuido a amplificar el debate en redes y en distintos foros vinculados a la devoción rociera.
Desde la asociación señalaron que, pese a su malestar, no tienen intención de emprender acciones legales contra esta performance, aunque sí se mostraron abiertamente molestos por lo que consideran una evidente “falta de respeto” hacia un símbolo religioso de gran arraigo cultural y espiritual en Andalucía.
El creador de la atracción defendió su diseño explicando que la propuesta se enmarca en una celebración simbólica de los 50 años de democracia y libertad en España. Mientras continúa la polémica, las reacciones siguen acumulándose en redes y espacios locales, evidenciando la división entre quienes ven en la atracción una experiencia lúdica y quienes la interpretan como una banalización de un elemento profundamente ligado a la identidad devocional rociera.