Los trabajadores del proyecto de investigación Estudio de los registros Paleontológicos Pliocenos de la Cuenca de Baza en el contexto Mediterráneo, que se desarrolla en la provincia de Granada, han sacado a la luz restos pertenecientes al que han considerado como el último cocodrilo de Europa.
El hallazgo se ha producido en el marco de esta iniciativa aprobada por la Consejería de Turismo, Cultura y Deportes de la Junta de Andalucía, que corresponde a la séptima campaña de excavaciones en el yacimiento paleontológico Baza 1. Durante esta intervención se han localizado 500 fósiles de grandes mamíferos, de mastodontes, de rinocerontes, caballitos de tres dedos llamados hipariones, de bóvidos grandes, ciervos gigantes, cerdos y grandes carnívoros como un oso gigante.
En los trabajos de lavado tamizado de los sedimentos, se ha identificado un diente de cocodrilo. "Es una especie de origen africano que llega a la Península Ibérica cruzando un brazo de mar, justo antes de que el Mediterráneo se desecara durante la Crisis de Salinidad del Mesiniense, hace algo más de 6 millones de años. Muy probablemente se trate del último cocodrilo de Europa", ha señalado el codirector de las excavaciones Bienvenido Martínez Navarro a el diario Ideal.
En total, se han tamizado 3.000 kilos de sedimentos, entre los que se han identificado micromamíferos, peces, anfibios, reptiles y restos de plantas que han logrado reconstruir el paleoambiente del Plioceno, división de la escala temporal geológica que pertenece al periodo Neógeno.