Hace unas semanas, en un pinar de Barbate colindante con el Parque Natural del Pinar de la Breña y Marismas del Barbate, el Ayuntamiento de Barbate procedió a la tala de cientos de pinos, coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente. Ecologistas en Acción, que denunció el hecho y recordó que este espacio fue excluido de ser protegido en 1989 debido a las presiones del Ayuntamiento y de los propietarios del mismo, que consiguieron que se declarara urbanizable en el PGOU aprobado en 1995.
Tras la denuncia de los ecologistas, el alcalde de Barbate, Miguel Molina, aseguró en Hoy por Hoy de Cadena SER La Janda que se había producido una tala de árboles pero que no había sido tal y como este colectivo denunciaba. Para el regidor barbateño, la tala es una forma de superar el "evidente riesgo que tiene para el Parque Natural cuando algo prende por allí y se corre el fuego", ya que este pinar "ha estado abandonado, con árboles saturados que casi todos se están muriendo".
Los pinos talados, junto a La Breña.
Molina cree que la tala de árboles ha supuesto una "limpieza" y que de esta forma "se está haciendo algo para darle vida a los árboles que están en la zona". "No lo entiendo. Aquello está totalmente limpio y adecentado; los pinares que queda van a estar mucho más limpios y más reforzados para poder crecer, con menor riesgo de incendio, con los cortafuegos que se han hecho al Parque Natural", ha explicado. Ante la pregunta del periodista de la Cadena SER de si esta tala supone "cortafuegos", el alcalde respondió tajantemente que sí: "Totalmente".
Una tala para construir 440 nuevas viviendas turísticas
Ecologistas en Acción ha reaccionado a la respuesta del alcalde de Barbate con duras críticas hacia su gestión y hacia sus explicaciones. Para este colectivo es incomprensible que un responsable público plantee que la tala masiva de árboles "sea una medida contra incendios forestales". "Esta lamentable idea, formulada por el ex presidente de USA, George Bush, no tiene sentido ni base técnica alguna", aseguran. "La seguridad para el Parque Natural no consiste en talar los bosques colindantes, sino mantener estos limpios y vigilados, y no permitir actividades de riesgo, como las acampadas masivas autorizadas por el alcalde de Barbate", añaden en esa línea.
Para el colectivo además la idea de que se tale para "evitar roedores", otro de los argumentos dados por el alcalde "es de risa" ya que estos proliferan por la basura del pinar, cuya responsabilidad dicen que corresponde a la propiedad, a la que el Ayuntamiento no obliga a hacerlo. Sobre las quejas del regidor sobre este colectivo, afirman que no tienen razón de ser y que obedecen a una intención por parte del Ayuntamiento de urbanizar la zona.
La basura acumulada en este pinar, que denuncia Ecologistas en Acción.
"Que el alcalde de Barbate nos acuse de no mostrar interés por este pinar es una auténtica falacia. Siempre nos hemos opuesto a su urbanización, y en todos los procedimientos de información pública y en reuniones con responsables del ayuntamiento hemos venido proponiendo su desclasificación y protección, pues no tiene sentido proponer, tal y como hace el actual PGOU, la tala total de este pinar para urbanizarlo y construir 430 nuevas viviendas para turistas",sostienen en un comunicado.
Sobre la realidad urbanística añaden que el alcalde oculta que "hay suelo terciario más que suficiente para absorber las demandas de promociones hoteleras" y que no dice toda la verdad al asegurar que este pinar pertenece a “una unidad que será sometida a unas modificaciones planteadas, lo que supone una reprogramación que se ha hecho del Plan General vigente de 1995”. "La realidad es que en la reprogramación del PGOU que está tramitando el ayuntamiento lo que se hace es dar un nuevo plazo para urbanizar este pinar, ya que el plazo para aprobar su Plan Parcial caducó hace 16 años", sostienen. La reprogramación del PGOU mantiene el pinar como “Suelo Urbanizable Sectorizado u Ordenado Transitorio SUOT 01 SUB B4 La Breña”, con 244.934 m2 de superficie, que incluye todo el pinar privado tras el puerto comercial, y se le da un nuevo plazo hasta 2026 para su urbanización.
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