El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha sido condenado a pagar una indemnización por tratar un cáncer con dos años de retraso. El retraso en el tratamiento de un linfoma de Hodgkin tipo esclerosis nodular que se le detectó a M.B.S., en 2013, hará que reciba una indemnización de 76.861 euros por "mala praxis". En concreto, según publica ABC, "por no habérselo comunicado al interesado ni haberse tomado las medidas oportunas para su tratamiento hasta dos años después, cuando ya se encontraba en grado IV".
La demanda parte de que este fallo de comunicación "le ha hecho perder a la afectada un tiempo inestimable en realizar las pruebas oportunas, prestarle la atención adecuada, determinar un cambio en el estadio tumoral y el pronóstico, con necesidad de prolongar el tratamiento oncológico necesario". El juez le ha dado la razón, como recoge el periódico generalista. El retraso en el diagnóstico le ha supuesto a la paciente casi mil días de curación.
En 2013, con la paciente con 40 años, se le mandó una primera ecografía y extirpación de un tumor con diagnóstico de linfoma de Hodgkin en grado II. A pesar de que el SAS tenía los resultados, y por razones desconocidas, ni se atacó ni se trató dicho cáncer. Dos años después, aquejada de fuertes dolores ingresó en Urgencias en Neumología, y es en ese momento cuando aparece el informe de Anatomía Patológica de la biopsia que ya se remontaba a junio de 2013.
"Ese informe se realizó por una clínica concertada con el Servicio Andaluz de Salud que inmediatamente, nada más conocer los resultados, lo comunicó vía telemática a la Sanidad andaluza". El tumor ya estaba en estado IV por no haber sido tratado y el índice de supervivencia pasa del 90 al 65%.
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