Un hombre de Marsella de 43 años acudió a la consulta con su oftalmólogo con el objetivo de revisar sus gafas. Un procedimiento a priori sin peligro que dejó a Adrien si vista. El caso está ahora en los tribunales después de salir de la revisión completamente ciego.
Según cuenta el paciente, todo ocurrió cuando el médico no comprobó la identidad de su paciente. Fue entonces cuando, al confundirlo con otro paciente, el doctor comenzó a realizarle tratamientos con láser. Adrien relata para la BFMTV cómo en apenas 10 minutos se quedó completamente ciego. El médico atribuye este error a una confusión de expedientes.
Adrien cuenta al medio francés BFMTV, que tras llegar a su oftalmólogo, este último le pidió que se sentara y pegara su frente contra una máquina. Él preguntó qué tenía que ver esa máquina con sus gafas. Su oftalmólogo le dijo en un tono seco: “Termino y luego te explico”. “No me dolió. Le pregunté qué era esa máquina, si era nueva. Me respondió que no, que era el láser”, explica Adrien y recoge ABC.
Este hombre ha tenido que someterse a dos operaciones para recuperar parcialmente la vista, pero todavía es muy sensible a la luz y depende de medicación para soportar el dolor cada día: "Me amputaron parte del ojo". “Es un error de mi parte. No soy mentiroso. Lo reconocí con el experto”, asegura el médico implicado a BFMTV.