Un fármaco creado en un hospital público frena el avance de varios tipos de cáncer

Omomyc, un fármaco experimental contra el cáncer desarrollado en el hospital público Vall d’Hebron de Barcelona, presenta pocos efectos secundarios y es tolerable, según los primeros estudios

Las doctoras Elena Garralada y Laura Soucek, del hospital público Vall d’Hebron de Barcelona.
Las doctoras Elena Garralada y Laura Soucek, del hospital público Vall d’Hebron de Barcelona.

Omomyc, un fármaco experimental contra el cáncer desarrollado en el hospital público Vall d’Hebron de Barcelona, presenta pocos efectos secundarios y es tolerable, según los primeros estudios. Además, en algunos pacientes consigue estabilizar la enfermedad. Estas conclusiones forman parte de los resultados preliminares que se seguirán evaluando en un ensayo clínico de fase II, que empezará en los próximos meses. También se probará el funcionamiento de Omomyc en combinación con quimioterapia u otras terapias.

Omomyc es una mini-proteína terapéutica desarrollada en el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) a través de su spin-off Peptomyc, gracias al trabajo de más de 20 años de la doctora Laura Soucek, codirectora del Programa de Investigación Traslacional y Preclínica y jefa del Grupo de Modelización de Terapias Antitumorales del VHIO, que demostró en la fase preclínica en el laboratorio que esta proteína es capaz de entrar en las células y alcanzar su núcleo, donde se encuentra el oncogen MYC. Una vez en el núcleo, Omomyc inhibe la habilidad de MYC para promover el crecimiento de tumores cancerígenos.

En abril de 2021, la doctora Elena Garralda, directora de la Unidad de Investigación de Terapia Molecular del Cáncer (UITM) – CaixaResearch del VHIO, en colaboración con otros dos centros de investigación españoles, iniciaron un ensayo clínico de fase I en el que han participado 22 pacientes para comprobar la seguridad de Omomyc y ver si había signos tempranos de control del cáncer. Los pacientes que participaron tenían diversos tumores sólidos, incluidos cánceres de páncreas, intestino y pulmón de células no pequeñas, y habían recibido al menos tres tratamientos previos, por lo que eran pacientes fuertemente pretratados.

En ocho de doce pacientes a los que se les realizó una tomografía computerizada después de nueve semanas de tratamiento mostraban una enfermedad estable en la que se había detenido el crecimiento del tumor. La doctora Elena Garralda presentará los primeros resultados de este ensayo clínico en el 34º Congreso EORTC-NCI-AACR (ENA), considerado una de las citas más importantes a nivel mundial sobre ensayos de fase I en cáncer, que se celebra en Barcelona del 26 al 28 de octubre.

“Todavía es muy pronto para evaluar la actividad del fármaco, pero estamos viendo la estabilización de la enfermedad en algunos pacientes. Es destacable el caso de un paciente con cáncer de páncreas que permaneció en estudio durante más de seis meses, y en el que el tumor se redujo en un 8% y hubo una reducción del 83% en el ADN derivado del tumor que circula en el torrente sanguíneo. También hay un paciente con un tumor de la glándula salival cuya enfermedad se mantiene estable y todavía está en el estudio después de 15 meses, y un paciente con sarcoma, que había respondido muy poco a tratamientos previos, que se mantuvo estable ocho meses”, explica la doctora Garralda.

“Lo más emocionante es que los marcadores biológicos muestran claramente que estamos inhibiendo MYC con éxito. Además, los efectos secundarios adversos son en su mayoría leves, lo cual es importante cuando comenzamos a pensar en los próximos pasos y en combinar Omomyc con quimioterapia u otras terapias”, añade la doctora Garralda. Otro aspecto importante del estudio se centraba en evaluar la farmacocinética de Omomyc, para ver si la vida del fármaco en el organismo del paciente era suficiente para poder tener un impacto sobre el tumor. El análisis de cómo se absorbió y procesó Omomyc en el cuerpo indicó que permaneció durante al menos 50 horas en la sangre, y, posiblemente, todavía más en los tumores.

“Omomyc es el primer inhibidor de MYC en completar con éxito un ensayo clínico de fase I y estar listo para pasar a un ensayo de fase II. Esto es un logro muy importante ya que MYC es una de las dianas más buscadas en el tratamiento del cáncer porque juega un papel clave en el desarrollo y mantenimiento de muchos cánceres humanos comunes, y, hasta la fecha, no se ha aprobado para uso clínico ningún fármaco que inhiba MYC. Este fármaco, desarrollado en el VHIO, es la primera mini-proteína dirigida a MYC que se prueba en un ensayo de fase I y demuestra que es capaz de inhibir la función de este oncogén de una forma segura y efectiva”, concluye la doctora.

Sobre el autor:

logo lavozdelsur

F. R.

...saber más sobre el autor

Archivado en:

Si has llegado hasta aquí y te gusta nuestro trabajo, apoya lavozdelsur.es, periodismo libre, independiente y en andaluz.

Comentarios

No hay comentarios ¿Te animas?

Lo más leído