La familia de una mujer de 82 años fallecida en Sevilla ha anunciado que el próximo martes presentará una denuncia penal contra la Junta de Andalucía, al considerar que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) no ofreció una atención adecuada en el tratamiento de su cáncer de mama. Acusan al sistema público de negligencia médica y lo responsabilizan directamente de su muerte.
El caso será llevado por el abogado penalista José Antonio Sires quien representa legalmente a la familia. En un comunicado, el letrado ha recordado que el Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama (PDP) en Andalucía forma parte tanto de la Estrategia Nacional de Cáncer como del Plan Integral de Oncología de Andalucía.
Sires ha explicado que este programa se rige por la Guía del Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama del SAS, que tiene como objetivos principales la realización de mamografías, la doble lectura por radiólogos y la derivación y seguimiento de casos dudosos o positivos.
El abogado señala que el Programa de Cribado de Cáncer de Mama sufrió una modificación técnica en 2023–2024 debido a la digitalización del sistema informático. Sin embargo, aclara que esa actualización “no suprimió el deber de seguimiento de resultados ni el plazo máximo de resolución diagnóstica”, que debían mantenerse operativos.
Fallecida este 2025
La mujer falleció el pasado mes de julio, y su familia decidió actuar tras conocer la oleada de fallos detectados en este programa, gestionado por la Junta de Andalucía en los hospitales públicos. Según el bufete, los errores han afectado a otras pacientes cuyas mamografías con resultados dudosos no fueron revisadas ni seguidas correctamente.
El caso concreto de la fallecida se remonta a 2020, cuando fue sometida a una mastectomía. Desde entonces, el protocolo establecía revisiones cada seis meses, algo que se cumplió hasta noviembre de 2023, fecha de su última revisión. En abril de 2024 debía haber sido citada de nuevo, “pero eso nunca sucedió”, asegura el abogado. En junio de 2025 fue derivada a cuidados paliativos y murió un mes después.
Sires sostiene que el protocolo es una norma de obligado cumplimiento, y que en este caso “la actuación de los diferentes médicos fue negligente y contraria a la lex artis”. Considera que la conducta del Servicio Andaluz de Salud fue “ineficaz e insuficiente, producto de su reticencia al cumplimiento de su deber frente a los administrados”, lo que habría derivado directamente en la muerte de la paciente.
La denuncia será presentada el próximo martes ante el Juzgado de Instrucción de Sevilla. Mientras tanto, los fallos detectados en el sistema de cribado del cáncer de mama en Andalucía ya han provocado otras denuncias ante la Fiscalía del Defensor del Paciente, Izquierda Unida y Adelante Andalucía, que señalan tanto a la recién dimitida consejera de Salud como a sus dos antecesores en el cargo.