El Parlamento andaluz ha vivido en la vuelta de su actividad este miércoles un enfrentamiento cargado de reproches entre el consejero de Presidencia, Antonio Sanz, y el diputado socialista Mario Jiménez durante el debate sobre la gestión de los incendios forestales en la comunidad.
El momento más tenso llegó cuando Sanz repitió: "Mientras usted estaba en la hamaca yo estaba regulando el tráfico en una carretera”, en alusión a su presencia en primera línea durante los fuegos de este verano. Lo hizo después de que Jiménez ironizara sobre el chaleco que el consejero porta en esas situaciones.
Sanz defendió que el uso de esa prenda es obligatorio en tareas como desplegar mangueras o entrar “dentro de un incendio”. Incluso instó al socialista a seguir el ejemplo de la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien reconoció públicamente que Andalucía “está siempre a la altura” en la lucha contra el fuego.
El cruce de acusaciones no quedó ahí. Jiménez denunció que “da asco” que las comunidades del PP escondan sus competencias y culpó a la Junta de precarizar al personal del Infoca. Acusó además al Ejecutivo de dejar sin ejecutar 940 millones en prevención desde 2019, de mantener “vehículos trampa” y de obligar a los bomberos a comprar parte de su propio equipo. “No quieren ser héroes, son trabajadores públicos que merecen condiciones dignas”, subrayó.
Sanz respondió calificando a Jiménez de “imprudente, atrevido e irresponsable”, y defendió la actuación de la Junta con cifras: 737 intervenciones entre enero y septiembre, el 85 % reducidas a conatos, y 5.667 hectáreas afectadas, ninguna de alto valor ecológico. Recordó también que Andalucía cuenta con 4.700 efectivos del Infoca y ha invertido 257 millones de euros en el dispositivo.
Vox, contra los menores inmigrantes
Por su parte, Benito Morillo, de Vox, decía que prefería pagar bomberos a menores inmigrantes, llevando su discurso contra la migración también a los incendios. La portavoz de Por Andalucía Inmaculada Nieto hablaba de que si Andalucía no había sufrido más incendios era por "el factor suerte". El diputado de Adelante Andalucía, José Ignacio García, aseguraba que algunos bomberos se han tenido que comprar parte de sus equipos de protección porque el Gobierno andaluz los manda a combatir el fuego en unas condiciones que no son dignas.
El choque parlamentario se saldó con reproches cruzados, acusaciones de mentir y alusiones directas a Moreno Bonilla y Pedro Sánchez, en un debate donde la gestión del fuego se mezcló con la lucha partidista y la precariedad de los bomberos quedó en el centro de la polémica.