Pedro Sánchez ha mantenido en blanco su agenda oficial este viernes, tal y como hiciera ya el jueves, según ha confirmado la información institucional publicada por Moncloa. La decisión del presidente del Gobierno coincide con el momento de mayor exposición mediática del llamado caso Cerdán, que afecta al actual secretario de Organización del PSOE. La ausencia de actos públicos se prolongará, al menos, durante el fin de semana, ya que por el momento no figura ninguna intervención prevista.
El jefe del Ejecutivo ya canceló el jueves su participación en el Congreso Confederal de Comisiones Obreras, un foro de relevancia en el que estaba programada su intervención junto al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, y el secretario general de UGT, Pepe Álvarez. En su lugar, asistió una delegación del Gobierno encabezada por la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que estuvo acompañada por otros miembros del gabinete como los ministros Jordi Hereu, Elma Saiz y Sira Rego.
Silencio institucional y ninguna cancelación oficial
A diferencia del jueves, en esta jornada no se ha producido ninguna cancelación anunciada, simplemente no hay ninguna actividad prevista. El silencio institucional ha sido interpretado como un gesto deliberado del presidente, que ha optado por mantenerse al margen del foco público mientras arrecian las especulaciones sobre posibles consecuencias políticas del caso.
La última aparición pública de Pedro Sánchez tuvo lugar este pasado miércoles. Entonces, participó en la sesión de control al Gobierno celebrada en el Congreso de los Diputados, para después mantener reuniones en el Palacio de la Moncloa con los portavoces de varios grupos parlamentarios, entre ellos ERC, Bildu, PNV y Coalición Canaria. Desde entonces, el presidente no ha vuelto a aparecer públicamente.
Por el momento, la única cita confirmada en la agenda presidencial es la cumbre de la OTAN en La Haya, prevista para el próximo martes. Fuentes próximas al Ejecutivo no han concretado si Sánchez aprovechará ese foro internacional para ofrecer declaraciones sobre la situación política en España o si mantendrá su perfil bajo también en el plano internacional.
Tensión creciente en el PSOE
Mientras tanto, en el entorno socialista crece la preocupación por los efectos que pueda tener esta estrategia de silencio. Algunas voces internas han reclamado una mayor transparencia y liderazgo para afrontar la crisis, aunque desde el núcleo duro del Gobierno aseguran que el presidente “está plenamente centrado en la acción de gobierno” y que “pronto retomará su agenda con normalidad”.
