El secretario de Organización del PSOE-A y alcalde de Dos Hermanas, Francisco Rodríguez, ha asegurado que no tuvo constancia previa de los hechos que se atribuyen a Francisco Salazar, quien dimitió de sus cargos tras conocerse denuncias por supuesto acoso a mujeres. La información se hizo pública el pasado sábado, día en el que Salazar abandonó su puesto como asesor en Moncloa y como adjunto a la Secretaría de Organización del PSOE.
Rodríguez ha explicado que fue ese mismo sábado, cuando se dirigía al Comité Federal del partido en Madrid, cuando tuvo conocimiento por primera vez de las acusaciones, a través de una publicación en medios. Además, ha dicho que conoce a Salazar desde hace unos veinte años y lo considera un amigo, pero que no había tenido indicios previos sobre conductas inapropiadas por su parte.
El dirigente socialista ha subrayado que, ante situaciones de esa naturaleza, deben denunciarse y el partido debe actuar en consecuencia, recordando que el PSOE se define como una organización feminista. Ha añadido que, en este caso, no fue necesaria una intervención formal, ya que Salazar renunció voluntariamente a sus responsabilidades tanto orgánicas como institucionales.
Rodríguez ha calificado el momento actual del PSOE como complejo y sostuvo que en contextos así surgen posicionamientos internos centrados en escenarios de futuro dentro de la organización. A su juicio, el caso Salazar está siendo utilizado en parte como una herramienta de debate interno más que como una cuestión exclusivamente personal o ética.
La mano en el fuego sin respaldar sus conductas
En referencia a su vínculo con Salazar, Rodríguez ha defendido su amistad con él, aunque también ha precisado que no respalda en absoluto las conductas que se le atribuyen según la información difundida. No obstante, ha rechazado lo que considera un escarnio público hacia la figura del exasesor.
El responsable de Organización del PSOE-A ha reiterado que ningún dirigente ni militante de base le había trasladado antes del sábado ninguna sospecha ni información relativa a las actuaciones que ahora se investigan. En su opinión, los hechos deben abordarse desde los principios que defiende el partido, pero también con el respeto debido a las garantías y tiempos procesales.
