Mientras Pedro Sánchez trataba de capear el temporal en el Congreso en la mañana de este miércoles, nuevas filtraciones sobre las investigaciones de la Guardia Civil continúan poniendo en el ojo del huracán a las dos manos derechas que ha tenido el presidente como secretario general del PSOE, José Luis Ábalos y Santos Cerdán.
Varios medios informan este miércoles de que Cerdán era propietario de una empresa que está en el centro de la trama. Es decir, de confirmarse, según las escrituras societarias a las que ha llegado la UCO, no es ya que hubiera mordidas por beneficiar a algunos, sino que la sociedad directamente era al 50% del dirigente navarro.
No hay muchos precedentes para una situación como esa, tan burda, en la política. A menudo, se emplean entramados, colocando sociedades pantalla, para desviar los fondos. De confirmarse que Santos Cerdán era dueño del 45% de las participaciones de Servinabar 2000 SL, significa que era una línea rápida para lucrarse. El periódico El Español señala al menos seis contratos públicos, algunos en UTE con Acciona, presunta corruptora en la trama. Obras en el Navarra Arena, en el Archivo General de Navarra...
Santos Cerdán niega ser propietario de la constructora: "¡Imposible!"
Todo, en una comunidad autónoma antes del salto al Gobierno central. La cuestión es que esa empresa es de Joseba Antxón Alonso, un amigo de Koldo García, asesor de Ábalos. Y se habla de hasta 100 millones de euros en contratos públicos en los últimos tiempos. Significa que venía de antes y habría continuado ahora. Era la empresa clave para el trabajo de Acciona en la comunidad navarra. Cerdán lo ha negado todo ante La Sexta: "¡Imposible! Yo no he visto, ni he tenido ni he firmado ninguna escritura de ninguna sociedad de ningún tipo en mi vida".
Pero las últimas horas no solo traen ese golpe para el PSOE. Porque José Luis Ábalos, hace apenas una semana, vivió en su domicilio un registro. Y según se ha conocido, el exministro estaba en su casa con una mujer, exactriz pornográfica. Y más allá de las sospechas que pudiera generar, sin consecuencias en este punto desde el punto de vista penal, la cuestión es que la Guardia Civil la pilló tratando de sacar de la vivienda un disco duro.
Un intento presunto de ocultación y de entorpecimiento de la labor de los agentes que muestra cómo esa trama organizada y millonaria que se escondía detrás del PSOE además no actuaba ni con diligencia ni con grandes previsiones. En lugar de tenerlo custodiado si no deseaba que fuera expuesto ante los investigadores el contenido de este dispositivo, Ábalos lo tenía en su casa cuando llegaron los agentes.
Entre tanto, el Ministerio de Igualdad, en manos del PSOE, dice que va a proponer en septiembre una ley que prohíba directamente la prostitución en España. Es la reacción de los socialistas a lo que se ha ido conociendo, como las grabaciones en que Ábalos y Koldo se repartían mujeres.
En general, es una situación insostenible y que hace preguntar a los socios de investidura del PSOE si tiene sentido continuar. El apoyo en el Congreso está cogido con alfileres. Gabriel Rufián decía "aprovechar" el tiempo "que queda" a la izquierda en el poder. Emiliano García-Page, en Castilla-La Mancha, decía en Cope a primera hora que estas filtraciones no han hecho más que empezar y que no ve salida digna al Gobierno. Está por ver si el intento de Sánchez de prohibir la prostitución después del verano se transforma en algo. Entre otras cosas, porque pocos pueden apostar a que el Ejecutivo llegue hasta esa fecha sin una dimisión o convocatoria de elecciones que cada día parece más cerca.