Si hace unos días, cuando visitó el Palacio de San Telmo para reunirse con Juanma Moreno, Juan Espadas pidió separar el debate andaluz del nacional para crear un debate propio, esta semana la sensación que transmite el líder de los socialistas andaluces es distinta. De hecho parece haber aceptado el reto de Moreno de contraponer las actuaciones de la Junta con las del Gobierno de España.
Tras lograr el peor resultado de la historia del PSOE en Andalucía y no conseguir ser un candidato con una popularidad suficiente para competir en unos comicios, el plan de los socialistas andaluces en la legislatura, o al menos en este año electoral en el que habrá municipales y generales, es intentar aupar al Gobierno de España en una situación de crisis y dificultad para las familias.
Las últimas encuestas del Centro de Estudios Andaluces ya mostraban una tendencia clara en las percepciones de la ciudadanía andaluza. Mientras Moreno conseguía captar toda la corriente de opinión positiva, a Sánchez le caía la percepción de culpabilidad por la situación actual socioeconómica con la subida de precios en el centro de todo.
Por ello, durante la sesión de control a Juanma Moreno, el líder de la oposición fue tajante y no escondió sus cartas al hablar de las bonificaciones al transporte, "cuando la consejera sale y dice que va a bonificar el 30% del transporte los andaluces piensan que esa bonificación la está dando usted y eso es mentira. Le pido que explique que esa medida es para el conjunto del país del Gobierno de España. Le honraría".
Moreno tampoco se escondió en esta confrontación Junta-Gobierno que ya parece clara al acusar a Espadas de actuar de "correa de transmisión" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "todos los días de forma permanente", y de defender "a ultranza los intereses" del Ejecutivo socialista, le ha advertido al líder del PSOE-A que "demasiadas veces no coinciden los intereses de Sánchez y los de Andalucía", por lo que le ha animado a "desgajar" ambos intereses.
La situación se ve más clara en todo lo referente a la sequía. Este viernes Espadas ha dicho que "no he escuchado a la consejera de Agricultura dar las gracias por la intervención del Gobierno de España en La Colada" en una intrevención desde Córdoba que alarga lo debatido en el Parlamento.
En el debate sobre la sequía los socialistas reprocharon a la Junta que está "centrada en su confrontación permanente" con el Gobierno de Sánchez, y emplazó al Ejecutivo andaluz a que decida si ejercen como "Gobierno de Andalucía" o como "portavoces de Feijóo", si priorizan los intereses de los andaluces o "los intereses electorales del PP de Andalucía".
"Espero que decidan lo primero y prioricen Andalucía, y entonces encontrarán al PSOE-A sin complejos y con responsabilidad", apeló Rafael Márquez a Carmen Crespo, a quien también reclamó que la Junta "se ponga las pilas" y ejecute "con mayor celeridad" las obras hidráulicas que declaró de interés autonómico en el año 2020, y al respecto ha señalado que, si no lo hace así, desde el Gobierno andaluz actuarán como "los malos jefes que carecen de legitimidad y autoridad" cuando exigen a sus empleados y son "los últimos" en llegar a la oficina, según ha puesto de ejemplo.