La entidad pública de Correos es la encargada de enviar a casa de los electores las papeletas y sobres para realizar el voto por correo de cara a este domingo. Según ha informado en una nota, además, el 2% de los votos aún quedaban por ser gestionados en la tarde de este lunes.
Así, de los 2,57 millones de votos por correo pedidos por los españoles, 2,12 millones de votos han sido entregados en las casas o lugares elegidos para la recogida, mientras que 450 mil votos tendrán que ser recogidos por quienes estaban ausentes en dos ocasiones.
Esos votos son entregas fallidas, toda vez que, para evitar casos de suplantación, en estas elecciones solo pueden ser recogidos personalmente por la persona que vota y no por un familiar o cualquier otro tercero que se encuentre en la vivienda.
De esta forma, es de esperar que se acumulen personas en las oficinas tanto para depositar el voto como para recoger las papeletas y acto seguido entregar los sobres del Congreso y el Senado. Un trámite para el que Correos se ha preparado con un refuerzo de personal. Asimismo, hay que recordar que el último día para votar en las oficinas de Correos es el jueves 20 de julio, mientras que el plazo para pedir el voto por correo -es decir, el inicio del proceso- finalizó el pasado viernes.
Desde Correos han querido subrayar "su compromiso con la sociedad española y su capacidad de trabajo gracias a la labor de sus más de 45.000 empleados y empleadas, los cuales seguirán trabajando hasta el día 23 de julio con la misma profesionalidad que en los días previos".
Y, en referencia a las acusaciones veladas de desvío de votos, han puntualizado que "en ningún momento ha existido riesgo sobre su correcto desarrollo". "Rechazamos todas aquellas insinuaciones o informaciones que han puesto en duda el trabajo de los profesionales de Correos. Debilitan nuestra democracia", remachaban.
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