Esta semana la imagen más importante de la política española ha sido la de Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, viajando a Kiev para reunirse con el presidente de Ucrania Volodimir Zelenski con el objetivo de trasladar el apoyo de España ante la guerra con Rusia. En la visita, el presidente del Gobierno anunció el mayor envío de armamento que se conoce hasta la fecha.
La visita fue llevada con discreción hasta que Sánchez estuviera seguro en la capital ucraniana. A pesar de ser acompañado por los GEO - que reabrirán la embajada - se vio al presidente del Gobierno con un chalego antibalas constantemente por los riesgos que suponía estar andando por Kiev. Junto a él, también ha habido imágenes de su equipo con la misma protección.
Y esto, aunque pueda parecer surrealista, ha despertado algunas críticas del Partido Popular. En concreto de la diputada Ana Blanco que, además, es la portavoz de interior, ha arremetido contra Óscar Lóez, jefe de Gabinete. El motivo de la crítica ha sido que el chaleco fuera de la Policía Nacional, "El 45% de la plantilla de Policía sin chalecos antibalas, un 10% caducados, pero el jefe de Gabinete de Sánchez tiene un chaleco sin ser policía. ¡Espero que ahora no haya un Policía sin chaleco!"
Desde sindicatos policiales como Jupol, con vínculos estrechos con Vox, también se ha denunciado esta situación.