Jerez es Madrid con mejor vino, Madrid es Jerez con más chulapos. O algo así. Este viernes, un trocito de la capital madrileña se ha trasladado al corazón de una plaza que lleva su nombre en el centro del municipio jerezano. No es nueva, pero sí está remodelada. Y reinaugurada por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que descubre la placa y hasta se atreve a bailar un chotis. También lo hace María José García-Pelayo. El viral está servido.
Hasta pocos minutos antes de su llegada a la plaza, se están dando retoques en el entorno. Como el operario municipal que se apura quitando una pintada, para que todo esté perfecto. Luego es de los primeros a los que saluda Almeida —"El alma, ¿no? Este es el día a día del ayuntamiento..."—, presentado por la alcaldesa jerezana, que hace de anfitriona, entre la abultada comitiva que los acompaña. Del gobierno municipal, a dos concejales madrileños, pasando por la presidenta de Diputación, Almudena Martínez, o cargos provinciales del PP.
El acto de reinauguración de la plaza Madrid —creada hace más dos décadas— tiene de todo. Desde descubrimiento de la placa con el nombre —incluyendo el escudo de la capital—, pasando por declaraciones de los máximos representantes de ambas ciudades, que se apuntan a bailar un chotis, acompañando a un grupo de chulapos traídos directamente desde Madrid, ataviados con la indumentaria típica. La gorra calada, chalequillo, clavel en la solapa y pantalones oscuros, ellos. Trajes coloridos, pañuelo en la cabeza y también clavel, ellas.
De alcaldesa de Jerez a alcalde de Madrid, y viceversa, no paran de sucederse piropos durante los minutos que están en la remodelada plaza Madrid, que luce con más zonas verdes, un nuevo parque infantil —con juegos adaptados incluidos—, parque biosaludable, mobiliario urbano a estrenar o un parque canino, en lo que se han empleado más de 330.000 euros de presupuesto municipal. Sin contar con la renovación de las redes de saneamiento y abastecimiento, también recientes.
"No solo podemos decir que está en su casa, sino que está en su plaza", comenta María José García-Pelayo, la regidora jerezana que se deshace en elogios hacia Almeida, del que dice que es "el alcalde de todos los alcaldes de España". "Para nosotros, que aspiramos a ser Capital Europea de la Cultura, tener al alcalde de la capital de España es importante", agrega, porque "las ciudades nos tenemos que llevar muy bien".
En la plaza Madrid, donde se agasaja a la comitiva llegada de la capital, también se han plantado cuatro madroños, uno de los símbolos —junto al oso— de la ciudad madrileña. "Solo falta que te compres una casa aquí", le espeta García-Pelayo a Almeida, entre risas. Hasta comenta públicamente que le están haciendo "un baby shower" al alcalde madrileño, que está a punto de ser padre —"le hemos regalado un chupete, una cesta con toallas, un neceser..."—.
Almeida, en su turno de palabra, le devuelve el "cariño" a su homóloga jerezana, de la que dice que es su "jefa", en referencia a su cargo como presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Y abunda, diciendo que "es bueno que en el mundo de la política nos encontremos a personas como María José García-Pelayo, que en tiempos de discordia busca puntos de encuentro. Necesitamos más María José García-Pelayo".
La nueva plaza Madrid, dice Almeida entre bromas, le viene bien porque tiene un parque infantil —en alusión a su incipiente paternidad— y también biosaludable —"en dos meses cumplo 50 años, así que lo veo muy cerca"—. Hasta recuerda que el Ayuntamiento jerezano también trabaja en la reforma de la cercana plaza Cataluña. "Es ejemplo de que en Jerez cabemos todos, sois acogedores, abiertos...".
Y suena el chotis Madrid, de Agustín Lara: "Cuando llegues a Madrid, chulona mía / voy a hacerte emperatriz de Lavapiés / y alfombrarte con claveles la Gran Vía / y bañarte con vinillo de Jerez". "No había uno mejor", apostilla un Almeida que termina bailando, con chulapas, y con la alcaldesa María José García-Pelayo, el pasodoble Los nardos, llevados por la euforia del momento.
Cuando se mueve la comitiva, se queda atrás Joaquina Sales, una de las vecinas de la plaza. De las más reivindicativas. De hecho, hasta la citan durante la reinauguración como gran culpable de que se impulsara su remodelación. Ahora está "contenta" con el resultado final, porque antes no paraba de ver desperfectos en un enclave en el que lleva viviendo 40 años.
El alcalde madrileño y la alcaldesa jerezana, con la comitiva, siguen la ruta marcada, que pasa por el Cabildo Viejo, donde se celebra una recepción oficial, con firma en el libro de honor del Ayuntamiento incluida, concluyendo el hermanamiento oficioso entre ambas ciudades.