Los hechos han ocurrido en Rusia, pero están dando la vuelta al mundo por la cruel muerte de un niño de 11 años que ha sido quemado vivo por otros niños.
La pequeña víctima era una de las jóvenes promesas del judo en su país. Los niños que han acabado con su vida tenían envida y celos de su gran rendimiento deportivo. Esto, precisamente, es lo que les llevó a usar bates de beisbol para golpearle hasta dejarlo casi inconsciente.
Tras rociarlo con gasolina, lo encerraron en un cobertizo y prendieron fuego. Dos niños de seis y siete años avisaron a varios adultos del incendio. Aunque varios hombres intentaron entrar para salvar al pequeño, nada pudieron hacer por su vida.
Las autoridades policiales han explicado que "durante una pelea encerrar a un niño dentro de un cobertizo. Cerraron desde afuera y clavaron la puerta. El fuego comenzó dentro del cobertizo y el cuerpo del niño fue encontrado quemado".