El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ordenó actuar con firmeza contra objetivos terroristas en la Franja de Gaza, nueve días después de la entrada en vigor de un alto el fuego, sin precisar si esto implica la finalización del acuerdo. La decisión se produjo tras lo que las autoridades israelíes consideran una violación del cese de hostilidades por parte de Hamás.
La Oficina del primer ministro informó que Netanyahu mantuvo una consulta con el ministro de Defensa y los responsables del sistema de seguridad antes de dar la orden de atacar los objetivos señalados en Gaza.
Según Israel, en la mañana de este jueves se registró fuego cruzado en la ciudad de Rafah, en el sur del enclave, entre milicianos y el Ejército israelí, después de que los primeros lanzaran un misil antitanque y efectuaran disparos contra las tropas. Sin embargos, periodistas palestinos aseguran que no fue un tiroteo, sino una excavadora de colonos israelíes lo que ha pasado por encima de un explosivo.
En respuesta, el Ejército inició bombardeos sobre la zona, con el objetivo de neutralizar la amenaza y desmantelar túneles y estructuras utilizadas para actividades consideradas terroristas. Además, reiteró que responderá con fuerza ante cualquier violación del acuerdo por parte de Hamás.
Israel insiste en atacar
El portavoz del Ejército israelí, Avichay Adraee, hizo un llamado a los residentes de Gaza para que no se adentren en áreas controladas por las tropas israelíes y pidió evacuar de inmediato a quienes pudieran encontrarse en esas zonas.
Por su parte, la fuerza Radea, unidad policial dependiente del Ministerio del Interior de Hamás, afirmó haber llevado a cabo una operación de seguridad en Rafah contra un escondrijo de Yasser Abu Shabab, líder de la milicia rival ‘Fuerzas Populares’. Las brigadas Al Qasam, brazo armado de Hamás, se desvincularon del ataque y reiteraron su compromiso con el alto el fuego, señalando que no tenían contacto con sus combatientes en la zona desde la ruptura del anterior acuerdo en marzo.
