Al menos 33 personas perdieron la vida esta pasada madrugada tras un bombardeo israelí sobre la escuela Fahmi al Fa, ubicada en el norte de la ciudad de Gaza. Según confirmó una fuente del Ministerio de Sanidad palestino, el centro educativo albergaba a decenas de desplazados forzados por la actual ofensiva militar. “El número total de víctimas en la escuela Fahmi al Fa hasta el momento es de 31. Los cuerpos de 30 personas están en la morgue del Hospital al Shifa, y uno en el de Ahli”, declaró Zaher al Waheidi, director de la unidad de información del ministerio.
El ataque dejó imágenes estremecedoras. Videos que habrían sido grabados por rescatistas de la Defensa Civil muestran un incendio de gran magnitud, cuerpos de niños entre los escombros y escenas de pánico en medio de las llamas. Las imágenes, aún sin verificar de forma independiente, dan cuenta del nivel de destrucción provocado por el impacto.
La reportera Almudena Ariza ha compartido un vídeo del terror: "Esta niña camina perdida entre las llamas tras el bombardeo de una escuela que albergaba refugiados en la ciudad de Gaza. Hay imágenes espeluznantes de cuerpos carbonizados que os ahorro. Y más de 20 muertos, muchos de ellos, niños. La crueldad de este gobierno israelí no tiene límites".
Israel alega un uso militar del edificio escolar
El Ejército israelí justificó el ataque asegurando que la escuela era utilizada como un supuesto centro de comando y control por parte de militantes de Hamas y la Yihad Islámica, aunque, como en otras ocasiones, no ofreció pruebas públicas que respaldaran esa afirmación. Las fuerzas israelíes señalaron que desde el interior del centro se recopilaba información para llevar a cabo ataques.
El ataque se enmarca en una ofensiva que ha desplazado a cerca del 90 % de la población de Gaza, unos 2,1 millones de personas. La mayoría de las escuelas del enclave palestino se han transformado en refugios improvisados para las familias que han perdido sus hogares, lo que ha convertido a estos espacios en lugares de alta concentración de civiles.
El contexto humanitario sigue deteriorándose a medida que avanza el conflicto. Las cifras de víctimas aumentan día tras día, y con ellas crecen las denuncias sobre la falta de protección para los civiles, en especial en zonas designadas como refugios. Las escuelas, antes espacios de educación, se han convertido en símbolos de un drama humanitario que parece no tener fin.
Las autoridades palestinas han reiterado la necesidad de una intervención internacional que garantice la seguridad de los civiles en Gaza. Mientras tanto, los hospitales continúan recibiendo heridos en condiciones extremadamente precarias, y los cementerios se llenan con los cuerpos de quienes no lograron escapar de los bombardeos.