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Una auténtica masacre ha tenido lugar en Haití, donde una banda armada ha matado, con cuchillos y machetes, al menos a 184 ancianos.
El jefe de la referida organización había ordenado estos asesinatos al considerar que parte de las víctimas, la mayoría de más de 60 años de edad, habían hecho brujería para que su hijo enfermase.
Un sacerdote vudú había asegurado al líder de la banda que las víctimas habían echado un mal de ojo contra su hijo. La matanza tuvo lugar en Cité Soleil, una de las zonas más desfavorecidas de Puerto Príncipe, la capital de Haití.
En apenas tres días, la banda armada ha acabado con la vida de 184 personas. "Movilizaremos a todas las fuerzas para aniquilar a estos criminales. Estos horrores no van a quedar impunes", han manifestado fuentes del gobierno haitiano.
A pesar del despliegue policial en la zona, los vecinos no respiran tranquilos, ya que el grupo armado, liderado por Monel Félix, alias Mikano, puede continuar su ofensiva una vez que ha confirmado la muerte del hijo del líder de la banda.
