El activista conservador estadounidense y aliado de Donald Trump, Charlie Kirk, de 31 años, ha muerto finalmente tras recibir un disparo en el cuello durante un evento en la Universidad de Utah Valley. El tiroteo ocurrió a los pocos minutos del inicio de un acto al que asistían cientos de estudiantes. En las imágenes difundidas se observa el momento en que el comentarista cae tras el impacto, mientras la multitud huye despavorida.
Kirk, casado con Erika y padre de dos hijos de 3 años y 15 meses, era conocido por su papel como cofundador y líder de Turning Point USA, un influyente movimiento estudiantil conservador. Su figura había ganado notoriedad como ferviente defensor del presidente Donald Trump y como voz destacada en debates sobre la política universitaria y la cultura política del país.
Las autoridades confirmaron que la investigación se centra en esclarecer los hechos y localizar al responsable del disparo. El director del FBI, Kash Patel, indicó que el sospechoso detenido fue liberado tras un interrogatorio inicial. "Nuestra investigación continúa y seguiremos divulgando información en aras de la transparencia".
Reacciones políticas y acusaciones cruzadas
El asesinato de Kirk ha desatado una fuerte reacción en el ámbito político estadounidense. Donald Trump ha expresado su pesar y ha pedido a los ciudadanos "comprometerse con los valores por los que Kirk vivió y murió: la libertad de expresión, la ciudadanía, el Estado de derecho, la devoción patriótica y el amor a Dios".
Trump ha responsabilizado a la "izquierda radical" del clima de tensión que, en su opinión, ha desembocado en este ataque. "Durante años, la izquierda radical ha comparado a maravillosos estadounidenses como Charlie con los nazis y los mayores criminales y asesinos en serie. Este tipo de retórica es directamente responsable del terrorismo que estamos viendo en nuestro país hoy. Esto debe parar ahora mismo", ha declarado el presidente, que ha calificado lo ocurrido como "un momento oscuro" en la historia de Estados Unidos.
El mandatario ha calificado a Kirk como un "campeón" en el trabajo de "guiar a jóvenes" en la política nacional. En señal de duelo, Trump ha decretado cuatro días de luto oficial y ha ordenado que las banderas del país ondeen a media asta, mientras la investigación continúa su curso.