La profesora Siham Zebda, natural de Tetuán, Marruecos, lleva trece años residiendo en Jerez, con una pausa de tres años en Arcos por motivos familiares. Ha obtenido la nacionalidad española recientemente, pero lleva desarrollando su carrera académica en España como profesora de Derecho Internacional y Relaciones Internacionales en la Universidad del Cádiz mucho tiempo antes, con un enfoque particular en la inclusión de personas migrantes en Europa y en España.
"Una de mis principales líneas de investigación es la inclusión de las personas migrantes en Europa, y por supuesto en Andalucía", explica Zebda. En su estudio sobre Jerez, la profesora destaca que la ciudad actúa como ejemplo de convivencia y solidaridad. "Una de las cosas más importantes es que no tenemos guetos. Sí tenemos personas concentradas en ciertas barriadas, pero no por la nacionalidad, sino por el nivel económico", precisa.
El estudio se llama 'Gobernanza multinivel e iniciativas no normativas para la inclusión de las personas inmigrantes a nivel local: el caso de Jerez de la Frontera (España)'. Lo hizo junto a Marcela Iglesias Onofrio, profesora de Sociología de la UCA.
Según Zebda, Jerez se diferencia de otras ciudades por su variedad de nacionalidades y por la integración natural de sus comunidades: "Aquí se habla muchísimo más de clasismo que de racismo. Por eso las personas migrantes no reciben un rechazo en comparación con otras ciudades".
La profesora también señala el papel de la historia y la cultura local en esta integración: "Quizás esto tiene un impacto sobre la población migrante. Jerez es un ejemplo de inclusión de las personas gitanas, que lo encontramos en todos los ámbitos: en la Universidad, en la policía, en todos los ámbitos. Y sabemos que eso no ocurre en todas las ciudades".
"Lo peculiar de Jerez es que tenemos una variedad de nacionalidades muy importantes. No podemos hablar de un colectivo o un país en concreto, ni siquiera un continente en concreto. Encontramos personas de muchos países", explica.
Sobre la colaboración entre instituciones y entidades sociales, Zebda subraya que Jerez ha logrado una coordinación destacable: "En el estudio que hicimos está muy demostrado que hay muy buena relación entre lo que es público con las entidades, que normalmente en otras ciudades no lo encontramos de tal manera. Con una forma de complementariedad, pero también de delegar en las ONG. Eso fomenta también la inclusión".
No obstante, la docente advierte de que todavía existen problemas de integración: "Es verdad que todavía tenemos problemas con la inclusión de las personas migrantes. En Jerez también. Se dice que España es un país acogedor y efectivamente lo es en comparación con otros países de la Unión Europea. Pero eso no deja que todavía tenemos que avanzar muchísimo más".
En el ámbito profesional y educativo, Siham Zebda reconoce que su propia experiencia ha sido positiva y que su llegada a la Universidad de Cádiz facilitó su integración: "Desde el primer momento fui acogida por mi equipo, y sin ellos, yo creo, no sé si en otro sitio hubiera llegado a donde estoy ahora. Ese acompañamiento me ha favorecido bastante para el tema de inclusión también en la propia Universidad”.
Por último, la profesora valora la apertura de Jerez hacia el alumnado extranjero y la importancia de desarrollar un modelo de universidad intercultural: "Cada vez vienen más alumnos de fuera, no solamente de Norte de África, sino de América Latina, incluso desde Asia. Es necesario tener este modelo de universidad intercultural. Además, colaboramos también con el Ayuntamiento, participamos en la mesa de convivencia, donde trabajamos para hacer un trabajo entre tres partes y no cada uno por su lado, sino que nos complementamos".
