Como el Guadiana es un tema que va y viene. Andalucía lleva un año en el que parece que sí, pero sin terminar de concretarlo. Este miércoles, el pleno del Parlamento de Andalucía ha avanzado en un tema más que controvertido, pero que hasta ahora no había dejado ninguna foto tajante. Las enmiendas a la totalidad presentadas por la oposición la han provocado.
Esta vez, Partido Popular y Vox han dejado claro a través de la votación su apoyo a la creación de la universidad privada CEU Fernando III y de la universidad privada Universidad Tecnológica Atlántico-Mediterránea (Utamed), esta última vinculada a Medac, una empresa fundada por Javier Imbroda y especializada en la Formación Profesional. Desde la oposición, la Utamed ha llegado a ser calificada como "chiringuito".
Desde que el Consejo de Gobierno comenzó los trámites en la pasada legislatura para la creación de estas dos nuevas universidades privadas (hasta el momento en Andalucía tan sólo existe la Loyola) ha habido un amplio debate y una gran polémica sobre la naturaleza de las mismas y los requisitos que cumplían o no. De hecho, los primeros movimientos del Ejecutivo de Juanma Moreno sobre estos centros tuvieron lugar a pesar de que existían diferentes informes en contra. Uno de ellos de las universidades públicas andaluzas. Por aquel entonces, entre los firmante como rector de la Universidad de Córdoba estaba José Carlos Gómez Villamandos. Ahora, Gómez Villamandos es consejero de Universidades y uno de los impulsores de estos centros privados.
Otras entidades como el Consejo de Estado o el Consejo Económico y Social de Andalucía bajo la dirección de Juan Marín también han mostrado sus dudas sobre la creación de estas universidades.
Tanto los rectores de las universidades públicas como la oposición han insistido durante el último año en que la aprobación de ambas universidades se va a llevar a cabo sin que cumplan determinados requisitos de calidad entre los que se sitúan los estándares mínimos de educación. Los responsables de las públicas han manifestado en varias ocasiones que no están en contra de que existan universidades privadas, pero sí de competir con ellas en desigualdad de condiciones.
El debate, marcado por la ausencia de Juanma Moreno al asistir a la final de la Europa League que disputa el Sevilla FC en Budapest, no ha movido ni un ápice las posiciones de los diferentes grupos. Ya antes del pleno, los partidos de izquierdas habían mostrado su rechazo.
La diputada de Por Andalucía, Esperanza Gómez, ya plasmaba sus dudas jurídicas, además de políticas, sobre la decisión de la Junta de Andalucía de impulsar estas universidades debido a que la profesora de Derecho Constitucional considera que el Gobierno de la Junta ha presentado iniciativas que no se acogen al derecho vigente, sino a un decreto derogado por ser más permisivo. "Dos universidades que han presentado menos papeles que una liebre van a ser autorizadas".
En una línea similar se ha pronunciado José Ignacio García, de Adelante Andalucía. "¿Para qué se crean universidades privadas? Para que los jóvenes que pueden pagarlo no tengan ni que estudiar", ha señalado antes de decirle a los alumnos que se presentarán a la selectividad "que hay una serie de alumnos que pueden pagar para entrar en la universidad privada no tienen que estudiar y sacar nota". "Que sepan que el modelo del PP es que la meritocracia vale sólo para los pobres", ha recalcado.
Desde el PSOE han solicitado al Gobierno andaluz que garantice que las universidades privadas que pretenden implantarse en Andalucía cumplan con los criterios de la máxima calidad y excelencia. También ha denunciado "la incapacidad y el desinterés del PP" al frente de la Junta en la gestión de los fondos europeos, recalcando que el Ejecutivo de Moreno "es opaco" en estas políticas y "no da explicaciones ni comparece" pese a que la ejecución de estos recursos públicos en la comunidad "alcanza sólo el 11%".
Gómez Villamandos ha asegurado que su consejería va a estar "muy vigilante" para que estas universidades cumplan los estándares de calidad al mismo tiempo que ha asegurado que en Andalucía no se va a regalar ningún título universitario.
El conflicto en la Universidad de Sevilla
La situación de las privadas había provocado un enfrentamiento entre la Universidad de Sevilla y sus centros adscritos ya que ahora pasarán a estar en la órbita de la Universidad Fernando III. Este miércoles se ha solucionado la situación que mantenía enfrentada a las corporaciones.
El Consejo de Gobierno de la Universidad de Sevilla (US) ha aprobado este miércoles "por asentimiento" el nuevo convenio que regula el proceso de desadscripción del centro Cardenal Spínola. El próximo curso 2023-2024 será pues "el último año" que la Hispalense oferta plazas de nuevo ingreso en este centro adscrito (820 en concreto), lo que "permite que el proceso de desadscripción del centro sea más suave y con menor impacto para el alumnado", tal y como se ha informado en la última sesión del Consejo de Gobierno y ha recogido la US en una nota de prensa.
Después de semanas de cruce de comunicados, con amenazas de acudir incluso a los tribunales, la oferta de nuevas plazas por parte de la Universidad de Sevilla lleva aparejado, entre otros aspectos, el compromiso de la Fundación San Pablo Andalucía CEU (FSPA) de "garantizar, en tanto se mantenga la impartición de titulaciones de la US por el Centro de Estudios Universitarios Cardenal Spínola, una absoluta separación entre las actividades del centro adscrito y la futura Universidad CEU Fernando III". Asimismo, la FSPA se "compromete" a que "ni los directivos ni los empleados administrativos de la Universidad CEU Fernando III ocuparán los referidos edificios y espacios".
Igualmente, el Consejo de Gobierno ha abordado la normativa por la que la institución académica va a regular el "procedimiento extraordinario" para la "incorporación" de los estudiantes matriculados en el grado en Enfermería del Centro Universitario de Enfermería San Juan de Dios a la Facultad de Enfermería, Fisioterapia y Podología de la Universidad de Sevilla, "siempre que así lo deseen". Este centro, también adscrito, ya confirmó a la US hace meses su intención de separarse de la US para unirse a la Universidad privada de Comillas.
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