Manuel Jesús tiene autismo infantil y solo media hora de monitora a la semana

Ana Aliaño, la madre del pequeño, reclama más horas para que su hijo y el resto de alumnos con necesidades educativas especiales, sean atendidos correctamente

Ana Aliaño, con su hijo Manuel Jesús, en su casa.

Manuel Jesús tiene cuatro años y tiene autismo infantil. En clase, necesita atención constante. "Es movidito, no habla y no pide las cosas, pero no se está quieto", cuenta su madre, Ana Aliaño, que como el curso anterior, se encuentra inmersa en una lucha para que le amplíen las horas a la monitora que lo atiende. Este año, una hora diaria, con suerte. El pasado tenía apoyo durante las cinco horas lectivas. "Vamos para atrás, como los cangrejos", se queja Aliaño, quien ha remitido escritos y llamado insistentemente a Educación para que se le proporcione atención por sus necesidades educativas especiales, sin éxito de momento.

El pequeño, que el curso pasado estaba escolarizado en el CEIP San José Obrero de Jerez, comenzó con dos horas de monitora, que se amplió otra más y se complementó con otras dos gracias al "apoyo" del colegio, cubriendo así el horario lectivo. Este año está en el CEIP Antonio Machado, donde cuenta con apenas una hora. "Hay una monitora para 24 niños", cuenta la madre de Manuel Jesús, que ahora tiene "entre media hora y una hora diaria", ya que solo cuenta con cinco horas semanales de monitora, profesorado de PT (Pedagogía Terapeútica), Audición y Lenguaje.

"El colegio ha pedido a la delegación de Educación en Cádiz el traslado de la monitora que está en el CEIP San José Obrero, pero se han negado", cuenta Ana. "Mi hijo tiene derecho a contar con monitora durante cinco horas, pero se ríen en mi cara", señala Aliaño, que denuncia, un año más, su situación en redes sociales. "Es la única forma de que te echen cuenta", dice. "Manuel Jesús es un niño que también puede tener TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad), es muy inquieto y según el CEIP San José Obrero tiene que estar atendido con vigilancia durante las cinco horas, por la experiencia  que tuvieron con mi hijo el curso anterior", escribe en Facebook.

Manuel Jesús, tocando el piano en su casa. Autor: Manu García

"La profesora de Infantil no se interesa por él", relata, "solo sabe decirme que ella no se puede partir en dos, que ya tiene otro niño con autismo en clase, que ella ya se ha quejado, yo le respondo que esas quejas no me las tiene que dar a mí, que lo que no entiende es que si mi hijo estaba atendido en San José  Obrero cómo se me ocurre traerlo aquí que solo va a estar atendido media hora. Me pertenece la zona tras cambiar de domicilio", reseña. Ana hasta remitió un escrito al Defensor del Pueblo Español contando su historia, que "admite que según la Ley mi hijo tiene que estar atendido las cinco horas que permanezca en el colegio".

"No me voy a conformar con media hora de monitora cuando a mi hijo le pertenecen sus cinco horas", avisa Ana Aliaño, quien asegura que no se queda "tranquila" cuando deja a su hijo en el colegio. "La profesora solo tiene dos ojos, no pueden con 24 niños", señala. "El segundo día de colegio llegó con las piernas heridas", recuerda, y teme que sea por la falta de atención que le prestan en el centro. "He pensado hasta en ponerme en el colegio con una pancarta, parece que es la única manera de que te hagan caso", dice, "porque no dan ninguna solución".

"El colegio está harto de mandar escritos pero deniegan la ampliación de horas de monitoras", sentencia Ana Aliaño, quien asegura que no parará hasta que consiga la atención que merece su hijo. Manuel Jesús, que cursa segundo de Infantil, "tiene autismo pero es un niño normal", por lo que su madre no ve necesario escolarizarlo en un centro específico, sino que cuente con la más horas de Personal Técnico de Integración Social (PTIS) en el CEIP Antonio Machado.