Catalina García, consejera andaluza de Sostenibilidad y Medio Ambiente, ha presidido este jueves en Castellón de Ampurias (Gerona) la creación de la Comisión Mixta de Seguimiento del protocolo que une a la Junta de Andalucía y la Generalidad de Cataluña en la protección del ibis eremita. El acto, celebrado en el Centro de Información del Cortalet, ha incluido una visita técnica a la Torre de Mornau, clave en la reintroducción de esta especie en los humedales del Ampurdán.
La comisión, fruto del acuerdo suscrito en marzo, tendrá como función coordinar, evaluar y dinamizar todas las líneas de acción conjuntas. Estará integrada por tres representantes de cada comunidad autónoma y presidida por la Junta de Andalucía. Durante la jornada, ambas administraciones han compartido sus estrategias de conservación y han cerrado un plan común de trabajo para 2025.
Un protocolo con ambición científica y ecológica
García ha remarcado que este protocolo supone “el resultado de años de trabajo riguroso y compromiso firme” y que la colaboración con Cataluña “abre una nueva etapa para reforzar la presencia de esta especie emblemática en la península ibérica”. El Geronticus eremita está considerado “en peligro crítico” por la UICN y el acuerdo se centrará en su recuperación mediante traslados, asesoramiento técnico y seguimiento científico.
La cita coincide con un momento clave para el Proyecto Eremita andaluz, que celebra 20 años de trayectoria. Desde 2004, la Junta ha colaborado con el Zoobotánico de Jerez, la Estación Biológica de Doñana (CSIC) y entidades europeas para establecer una población estable en La Janda (Cádiz). García avanzó además que se estudia establecer una segunda población en otra zona de Andalucía.
En estos años, el proyecto ha conseguido una colonia autosuficiente con 306 ibis y 47 parejas reproductoras en tres núcleos clave: La Barca de Vejer, San Ambrosio y Castilnovo. En la actual campaña, se ha logrado un hito: 56 pollos nacidos en libertad fueron anillados, la cifra más alta desde que comenzó el programa. Desde su inicio, se han liberado 695 aves y han nacido 319 pollos en libertad, muchos de ellos equipados con GPS para permitir su seguimiento.
Los primeros ibis andaluces ya viven en Cataluña
En el marco del nuevo protocolo, ya se ha trasladado a Cataluña un grupo de 19 pollos de ibis procedentes del Zoobotánico de Jerez. La operación, realizada del 23 al 25 de junio, ha contado con el equipo técnico andaluz, que acompañará la aclimatación y liberación de estas aves en los humedales del Ampurdán. “Hoy reforzamos el compromiso compartido de proteger la biodiversidad sin fronteras”, ha subrayado Catalina García.
La consejera ha puesto en valor el papel pionero de Andalucía en la conservación de una especie desaparecida desde hace siglos del paisaje europeo. “Hemos demostrado que es posible revertir la pérdida de biodiversidad con proyectos serios y sostenidos”, ha afirmado. También agradeció a los técnicos, científicos y colaboradores que han hecho posible este avance.
La visita institucional incluyó un recorrido por las instalaciones de la Torre de Mornau, que ya actúa como punto de aclimatación y futura cría en libertad para los ibis andaluces. Cataluña trabaja para establecer una población residente que sirva de puente natural entre los núcleos migratorios europeos y la colonia andaluza.
Este proyecto se enmarca en una estrategia internacional más amplia, con vínculos con el Gobierno de Marruecos y el LIFE Northern Bald Ibis. Según García, “el protocolo suscrito hoy es una hoja de ruta ambiciosa y realista” que refuerza la colaboración entre comunidades autónomas para salvar una especie única y amenazada.
El acto ha contado con la presencia de representantes de ambas administraciones, entre ellos el viceconsejero de Sostenibilidad Sergio Arjona, el director general Juan Ramón Pérez Valenzuela, el secretario catalán de Transición Ecológica Jordi Sargatal, y responsables técnicos del Zoobotánico de Jerez y la Fundación Alivefund.