Una tarjeta de crédito, una financiación de un producto o un préstamo concedido sin las suficientes garantías de devolución. Las situaciones que se derivan del hecho de que necesitamos reclamar los pagos de nuestros clientes son muchas. La morosidad está a la orden del día. Y, si tienes una empresa, seguro que te has dado cuenta de que es uno de los factores que más desgastan a la hora de gestionarlas.

Por ello, es recomendable confiar tus necesidades en empresas específicas que se dedican a gestionar las deudas adquiridas que provengan desde diferentes fuentes. Además de las que hemos mencionado anteriormente, también las que hacen referencia a las facturas impagadas, por ejemplo, entre otros muchos motivos. El servicio para PYMES de Intrum ofrece servicios de asesoramiento jurídico, y es uno de los líderes del sector cuando se trata de gestionar las deudas sin descuidar el bienestar del cliente.

¿Cómo puede mi empresa evitar los impagos?

Define tus estrategias a la hora de conceder un crédito

Uno de los puntos de partida sobre los que tienes que trabajar son las condiciones a partir de las cuáles concedes los créditos. Estas condiciones tienen que ser las mismas para todas las personas, sin restricciones.

Por ello, uno de nuestros consejos es que realices un manual y un documento. En el que se tenga que cumplir todo lo que queda reflejado en él.

Comprueba la solvencia de tus clientes

Antes de conceder un crédito, tienes que comprobar la solvencia de tus clientes. Si no lo compruebas, tendrás un importante riesgo de caer en una situación de impago. Sin embargo, debes de saber que cuando eso ocurre, no tienes que darlo todo por perdido.

Intrum ofrece un servicio a PYMES de adquisición de los diferentes derechos sobre la deuda, pasando a ser el acreedor de la misma. Y garantizando el cobro a las empresas. Sin embargo, si es posible no llegar a este punto, mucho mejor. En la solvencia está la clave para poder gestionar todo tipo de créditos.

¿Cómo va a ser la devolución?

Tener claras cuáles van a ser las formas de pago es muy importante. Para ello, es conveniente que tengas un documento en el que todo quede bien detallado. Así como las consecuencias de no hacer frente a los pagos de la deuda en el momento correspondiente.

Es importante que cuentes con cierta flexibilidad a la hora de gestionar esta devolución. Cuantos más planes de devolución tengas para ofrecer a los clientes, más fácil será que puedas recaudar la deuda de nuevo. Establece diferentes opciones de plazos, así como diferentes términos para los mismos.

Una empresa especializada en recobro

Una empresa especializada en recobro va a ser la clave para que, como PYME, no tengas que enfrentarte al desgaste que supone la deuda. Por ello, lo mejor que puedes hacer es delegar tus necesidades en manos profesionales.

Gracias a su experiencia en el sector y a sus diversas técnicas, lograrán obtener los mejores resultados, sin por ello perjudicar al cliente. Y es que hay que tener en cuenta que el trato con el cliente es clave en el momento de gestionar cualquier tipo de deuda. Pues ante un tema tan sensible como este, conviene maximizar los cuidados de los mismos.

El cobro de una deuda es un tema de suma importancia. Tanto por el impacto que tiene hacia la empresa como por la inquietud que puede sufrir el cliente. Por ello, en las manos expertas estará la solución a todos los problemas.

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