Toni Nadal, tío de Rafa Nadal, fue durante muchos años entrenador de su sobrino. El dúo que formaron permitió al manacorí establecerse en la élite del tenis mundial y convertirse en uno de los mejores deportistas de la historia. Sin embargo, su relación profesional terminó hace unos años, al menos en la faceta de entrenador.
El idilio entre tío y sobrino duró hasta el final de la temporada de 2017, pero sus caminos profesionales nunca llegaron a separarse del todo, pues Toni Nadal ha seguido trabajando en la Rafa Nadal Academy.
Rafa, desde 2017, ha encontrado en Carlos Moyá a otro gran entrenador, aunque con menos fidelidad o entrega que la que ofrecía Toni. El tío ha vuelto al escenario ATP recientemente porque se ha confirmado que ejercerá como entrenador, pero esta vez para asesorar al canadiense Felix Auger Aliassime, el tenista que ocupa la posición 20 en el ranking. Lo acompañará en algunos torneos, entre ellos Madrid, Roland Garros y Wimbledon.
Para un tenista, al igual que para jugadores de pádel o de bádminton, la figura de un entrenador, un equipo que le asesore física y mentalmente y que le sirva de acompañamiento, es vital para garantizar un buen rendimiento.
¿Qué labor es la que debe cumplir el entrenador en el tenis y otros deportes de raqueta?
Hablar de entrenador y de coach en el ámbito deportivo, especialmente en los deportes individuales, es prácticamente hablar de términos sinónimos. Un entrenador, pongamos como ejemplo a Toni Nadal o Fernando Rivas, el entrenador de Carolina Marín, no son tan valiosos por su conocimiento del juego, sino por la capacidad que tienen para que sus pupilos siempre estén concentrados en el partido.
Posiblemente nadie en el mundo del tenis tenga la fortaleza mental de Rafa Nadal, y eso es algo que ha conseguido en gran medida por su esfuerzo individual, pero en este logro han participado todos los miembros de su equipo, desde sus entrenadores hasta sus fisios pasando por sus preparadores físicos y su familia.
De este modo, una persona que se quiera iniciar en el mundo de la asesoría deportiva, porque se cree capaz de enseñar a otros deportistas sus conocimientos, hace bien en acudir a formación reglada en coaching. Con esta disciplina, insistimos, no se enseña a los jugadores a golpear mejor la pelota, sino a seleccionar dinámicas de juego, estar más preparados psicológicamente en las competiciones y, en definitiva, guiar a los jugadores.
El trabajo de un coach deportivo va más allá del apoyo en pista
El entrenador deportivo en los deportes de raqueta ayuda a los jugadores a desarrollar todo su potencial en la modalidad. Cuando se trata de deportistas profesionales, esta figura actúa como una figura clave que dirige la preparación física y mental.
Los coaches son los encargados de entrenar a los deportistas mediante el análisis de sus actuaciones, la instrucción en sus habilidades y también con el apoyo en pista. Cuando se llega a ser entrenador profesional, la instrucción propiamente física, el aprendizaje sobre cómo golpear las pelotas, pasa a un segundo plano, pues son los propios deportistas los que dominan esa faceta mejor que nadie.
Sin embargo, es en esos momentos cuando es fundamental adquirir otros estímulos que estén más encaminados hacia ayudar al deportista en la parcela mental. La presencia de un coach, un entrenador y un equipo completo de asesores es vital para los deportistas profesionales, pues van a ser ellos los que no pierdan el foco en los objetivos a cumplir por los deportistas.
¿Es válida la filosofía del tenis para el mundo del pádel?
Rafa Nadal es, quizás, el mejor ejemplo de cómo una fortaleza mental insuperable, sumada a un talento innato para el tenis, le han permitido llegar a lo más alto en su deporte. ¿Se puede repetir este mismo escenario en el mundo del pádel? Por supuesto que sí.
Todos los deportes de raqueta tienen aspectos en común, aunque también muchas diferencias. El pádel, por ejemplo, es un deporte que se disputa en parejas, así que los entrenadores tienen que trabajar mucho la compenetración con los compañeros.
Vemos en PadelZoom que referentes en el mundo del pádel trabajan en concienciar a la gente en este aspecto para que no abandonen la práctica. La figura de los entrenadores deportistas es igualmente importante en el profesionalismo como en la práctica amateur, si bien sus modos de actuación son diferentes.
En el primer caso, la idea principal es ayudar al deportista a sacar partido de sus puntos fuertes y reforzar las pequeñas debilidades. Con los deportistas amateur, además de que el perfeccionamiento táctico y técnico juega un papel muy relevante, también es fundamental ofrecer estímulos para que los deportistas se sigan viendo atraídos por su modalidad.
Y todo esto es imposible de llevar a cabo sin una preparación adaptada. No basta con que el coach sepa transmitir bien sus enseñanzas, sino que ha de estar constantemente actualizándose, formándose y adquiriendo experiencias. No todo el mundo puede ser Toni Nadal, pero el objetivo es trabajar como lo hace él.
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