Joaquín Macías ha solicitado también su suspensión temporal de militancia tras conocer el fallo judicial que le sentencia a un año de prisión. Recurrirá a la Audiencia Provincial.
El secretario de Política Municipal del PSOE de Cádiz, Joaquín Macías, ha enviado en la tarde de este pasado martes una carta a la dirección provincial donde solicita la suspensión temporal de su militancia en el partido, tras ser condenado a un año de cárcel por acoso laboral durante su etapa como concejal en el Ayuntamiento de Arcos. El PSOE de Cádiz ha informado de que Macías recurrirá la sentencia, que no es firme —ya que ha sido dictada por el Juzgado número dos de lo Penal de Jerez— ante la Audiencia Provincial. Además, el dirigente socialista ha optado por renunciar también a su cargo en el seno de la comisión ejecutiva provincial en aras de salvaguardar los intereses de la organización, por respeto a las siglas y para poder preparar la defensa de su caso.
"Muy afectado" por el pronunciamiento de la Justicia, que ha considerado "no se ajusta a la realidad de los hechos", Macías ha estimado que "siendo un firme defensor de las normas que regulan el partido debe apartarse durante el tiempo preciso para que pueda demostrar su inocencia, ya que su honestidad y honradez no se pueden poner en duda". Horas antes, el secretario general del PP de Cádiz, Antonio Saldaña, ha preguntado si la secretaria general del PSOE-A, "Susana Díaz, Ciudadanos, y la secretaria provincial del PSOE, Irene García, van a aplicar su código ético que tanto enarbolan una y otra vez", por la "condena a un año de cárcel del número tres del PSOE de Cádiz, Joaquín Macías, por acoso laboral".
En una nota, Saldaña ha recordado que "hace pocas semanas, el PSOE se mostraba muy vehemente y beligerante hacia un miembro del PP que ni siquiera había sido juzgado". En este sentido, ha añadido que "ahora veremos a donde llega el grado de compromiso del código ético de los socialistas, y si Susana Díaz tiene que tomar cartas en el asunto porque el señor Jiménez Barrios e Irene García no son capaces de controlar a sus dirigentes en la provincia". Finalmente, ha afirmado que "con una condena firme como esta, el PSOE y, también, sus socios de gobierno, que tanto exigen en unos sitios y en otros no, tiene que explicarle a los ciudadanos qué decisiones van a tomar". La decisión, finalmente, ha sido la de la suspensión temporal de militancia y la renuncia a su cargo en la ejecutiva provincial.