El vandalismo ha dañado los murales que durante los últimos años se han ido realizando en la recientemente rebautizada plaza Manuel José García Caparrós.
Sin entrar a valorar en profundidad el contenido de estas “pintadas obscenas” hechas sobre las creaciones de artistas en diferentes citas culturales y participativas con el arte como protagonista, esto supone un “atentado contra el arte y el patrimonio local”, afirma el responsable municipal de Participación Ciudadana, Manuel Izco.
“El respeto es fundamental para la convivencia, y el vandalismo y estos actos sobran y suponen un daño que no es gratuito, ya que al propio que se realiza al estropear una obra de arte, se añade el económico, para limpiar y revertir el destrozo provocado”, apunta Izco.
El edil apunta que “no podemos dejar pasar acciones como ésta, pues lejos de ser un acto infantil, supone una falta de respeto a las normas de convivencia que incluso puede acarrear sanciones económicas, en el que caso de que se atente contra el patrimonio”.
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