El Primero de Mayo se celebra en Jerez con una manifestación convocada por CNT, SAT y varios colectivos. Los sindicatos mayoritarios se concentran en Cádiz.
El 1 de mayo de 1886, en EEUU, los trabajadores mantenían una lucha para conseguir los tres ocho —ocho horas para trabajar, ocho para dormir y ocho para la casa—, en una protesta que se prolongó varias jornadas y en el marco de la cual estalló un artefacto explosivo, días más tarde, que mató a un policía, suceso por el que fueron detenidas 30 personas, aunque solo siete de ellas fueron condenadas a muerte, de las que tres acabaron en prisión y las otras cinco en la horca, por lo que se les conoce como Los mártires de Chicago desde que en 1989, el Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional, declaró esta jornada como el Día del Trabajador.
Desde entonces se vienen celebrando manifestaciones, en multitud de países de todo el mundo, para reivindicar mejores condiciones laborales. La provincia de Cádiz no podía ser menos, pero lo celebra a su manera. La tasa de paro provincial, que roza el 34%, y la de Jerez, que supera el 35%, hace que los sindicatos salgan a la calle a reclamar actividad e industrias para una región que se sigue desangrando. Pero, eso sí, por separado. La capital acoge dos marchas distintas, la convocada por CCOO y UGT y la organizada por organizaciones sindicales como CGT, SAT, CTA, Ustea y Autonomía Obrera, entre las que suman unos 7.000 manifestantes por las calles de Cádiz. La cifra es más modesta en Jerez, donde CNT, SAT, la Asamblea de Estudiantes, el Ateneo Libertario Eliseo Reclús y el colectivo feminista La Empoderá, abanderan una protesta que parte de la Avenida Álvaro Domecq para culminar en la plaza del Arenal.
“La precariedad laboral es un fenómeno estructural”, se quejan desde CNT, que considera que “nuestra ciudad necesita personas que desenmascaren este sistema que tanto daño produce”. La organización sindical asegura que “la fortaleza del pueblo reside en su organización”, por lo que insta a los ciudadanos a unirse a una marcha que concentra en Jerez a varios centenares de personas. “La precariedad corroe hoy las vidas de una clase trabajadora atemorizada, resignadamente callada, que expresa en forma de enfermedad y angustia la degradación y explotación que sufre”, apuntan como lectura de un manifiesto. 
“Obrero, si no luchas nadie te escucha”, vociferan por las calles de una ciudad a la que le cuesta salir a la calle el Primero de Mayo. "En este Primero de Mayo, siempre recordando a quienes cayeron luchando por una vida digna, queremos gritar que frente a la inmoralidad y a la injusticia que genera el capitalismo siempre va a estar la lucha organizada y consciente de las clases populares”, apuntan desde CNT. “Seguimos en las mismas, con políticos que roban y ciudadanos que aguantan y aguantan”, sostiene un miembro del sindicato que se hace con el micrófono a la llegada de la protesta al Arenal. “El país ha retrocedido 50 años, volvemos al franquismo disfrazado de democracia”.
Los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, no se movilizan en Jerez y deciden unirse a la marcha provincial celebrada en Cádiz, donde Lola Rodríguez y Francisco Andreu, secretarios generales de las organizaciones en la provincia, insisten en “la necesidad de crear empleo estable y digno, unos salarios justos, unas pensiones dignas, más protección social y unos servicios públicos bien financiados y eficientes”. “Nos repiten una y otra vez —señalan— que estamos saliendo de la crisis y nos venden una situación de bonanza y estabilidad que la familia, la clase trabajadora, no percibe por ningún lado”. El PSOE, “que siempre está al lado de los trabajadores", sostienen cargos provinciales del partido; IU, que reclama “un plan especial de empleo para Cádiz"; o Podemos, que denuncia que “el compló entre poderes políticos y económicos está contribuyendo a normalizar la precariedad”; participan también en una marcha doble, la de Cádiz, que reúne a unas 7.000 personas.
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