Lamentable suceso en el centro de Jerez este viernes a media tarde. Una señora que paseaba a su perro, un caniche, ha visto cómo el animal perdía la vida en el acto tras ser atropellado por un vehículo que circulaba en ese momento por la calle Tornería.
La dueña del perrito, una vecina de la zona, ha recibido ayuda de otros viandantes que han sido testigos de los hechos e incluso han acudido a un bar cercano a por una bolsa de plástico para introducir el cuerpo del animal. El conductor del coche ni tan siquiera se ha bajado para ver lo ocurrido y se ha ido del lugar del atropello, lo que ha provocado una lógica indignación tanto en la afectada como en los testigos del triste suceso.
Desde que la calle Tornería perdió la pilona de acceso solo para residentes y vehículos autorizados a la altura de la plaza de Rafael Rivero, muchos vecinos y comerciantes de la zona se han venido quejando del alto volumen de tráfico que soporta una vía tan estrecha del centro de la ciudad. No es el primer suceso que se produce. Hasta camiones de repartos han llegado a quedarse atascados en un punto de la vía, chocando con cornisas de balcones.
Hace ya mucho que Tornería y esta zona perdió su condición de preferencia peatonal y cada día son más los vehículos que cruzan esta calle para acortar camino para atravesar el centro de la ciudad, más si cabe desde que el entorno de la plaza San Juan quedó inhabilitado para el paso de vehículos motorizados por unas obras de reurbanización inconclusas.
El Ayuntamiento de Jerez tiene en marcha el plan de Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que, de alguna manera, pondrá cordura a la movilidad y al tráfico en el centro de la ciudad, caótico de un tiempo a esta parte y en el que, por suerte, pocas cosas pasan. No ha sido el caso de este viernes, cuando la mencionada vecina ha visto cómo perdía la vida su animal de compañía al ser atropellado por un coche que recorría la calle.
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