La búsqueda de enganches ilegales se salda con detenciones y cortes de luz y agua en San Juan de Dios

La Policía Nacional realiza arrestos en la barriada y detecta la existencia de plantaciones de marihuana mientras operarios realizan interrupciones del suministro eléctrico y del agua

La Policía Nacional, registrando viviendas en San Juan de Dios.

Los vecinos de la barriada de San Juan de Dios de Jerez se han encontrado durante la mañana de este martes con la visita de operarios de las compañías eléctrica (Endesa) y del suministro de agua (Aquajerez), que han realizado cortes en la zona, por la presencia de enganches ilegales en viviendas de la zona. Desde primera hora de la mañana se han sucedido las interrupciones en la red, que han perjudicado a residentes que abonan las facturas, generando situaciones de tensión entre vecinos.

Varias lecheras de la Policía Nacional, así como agentes de Policía Local, han escoltado a los trabajadores mientras realizaban los cortes, ante el enfado de los vecinos, que se aglomeraron en torno a los agentes y a los operarios. "Siempre pagamos justos por pecadores", señalan fuentes vecinales a lavozdelsur.es, criticando que se realicen las interrupciones de suministros de forma indiscriminada, sin distinguir entre los residentes que se dedican al cultivo de sustancias estupefacientes y los que no realizan actividades ilícitas.

"Hemos hecho un despliegue para regularizar situaciones ilegales", cuentan desde Aquajerez, porque los enganches, señalan, "estaban afectando a viviendas colindantes", que estaban sufriendo "pérdidas". La Policía Nacional, que protege a los trabajadores de las empresas mientras ejecutan los cortes de suministro, dará detalles de la operación, que se ha saldado con alguna detención, sin que de momento se pueda confirmar el número exacto de arrestos.

Hace menos de un mes, los vecinos de uno de los bloques de la barriada estuvieron más de 48 horas sin suministro eléctrico, afectando a unas 60 viviendas. Los residentes vienen sufriendo problemas con el suministro de forma continuada, mayormente por la presencia de plantaciones ilegales que sobrecargan la red eléctrica y que terminan perjudicando a bloques colindantes. "Pagamos todos, aunque no tengamos nada que ver", dicen vecinos de la zona.