El bloque de izquierdas, que volverá a sentarse con lo socialistas este viernes, exige "equilibrio" ante un hipotético pacto porque ambos grupos cuentan con siete concejales y "venimos a un gobierno nuevo, no a reforzar al actual".
Ya podía intuirse que las negociaciones para un futuro tripartito de gobierno en el Ayuntamiento de Jerez no iban a ser precisamente una balsa de aceite. Diez días después de que el bloque conformado por Ganemos Jerez e Izquierda Unida pusiera sobre la mesa su documento programático —con 133 medidas concretas— y su propuesta de gobernabilidad —que como adelantó lavozdelsur.es exige el control de la mayoría de la junta de gobierno local para que, llegado el caso, Mamen Sánchez siga siendo alcaldesa— los socialistas siguen sin dar respuesta. Eso, pese a que aseguraron que la pasada semana ofrecerían su opinión sobre los planteamientos iniciales que ambas formaciones les habían trasladado en la primera toma de contacto oficial. En una rueda de prensa conjunta ofrecida por la coalición de izquierdas y la agrupación de electores en el Ayuntamiento, tanto el portavoz de Ganemos, Santiago Sánchez, como el de IU, Raúl Ruiz-Berdejo, han explicado las claves de ese pacto de gobernabilidad, "la única propuesta que a día de hoy hay sobre la mesa", han incidido.
El punto más decisivo, lógicamente, hace alusión al puesto de máxima responsabilidad municipal: la Alcaldía-Presidencia. En este punto, la oferta inicial de ambas formaciones al PSOE es nítida: o bastón de mando, o control de la junta de gobierno local. "No venimos a sumarnos al gobierno del PSOE, nuestra idea es construir un gobierno que funcione junto al PSOE", ha argumentado Sánchez, para abundar: "Por un lado, estamos IU y Ganemos, y por otro el PSOE; queremos un gobierno de equilibrio de fuerzas, y el PSOE representa el 50% e IU y Ganemos representa el otro 50. ¿Esto cómo se materializa? Un grupo debe tener la Alcaldía y que los otros dos tengan el primero y segundo teniente de Alcaldía. No entramos a valorar quién debe ocupar cada espacio, pero sí tenemos claro que en este equilibrio de poder el grupo que tenga la Alcaldía no puede tener mayoría en la junta de gobierno local. Esto refuerza nuestra idea".
El tiempo se agota y la única alusión del PSOE a lo que ha ido apareciendo públicamente en los últimos días es idéntica a la de hace unos meses: "No vamos a aceptar vetos ni imposiciones". Pero la propuesta de gobernabilidad suena a, o lo tomas, o lo dejas, por lo que a día de hoy parece complicado llegar a un acuerdo. En este punto, Ruiz-Berdejo ha insistido en que la negociación no debe prolongarse más allá de febrero. "No vamos a hacer un culebrón por capítulos de esto, tanto si evoluciona favorablemente o no. Esto hay que resolverlo lo antes posible", ha enfatizado. El líder de Ganemos, por su parte, cree que el planteamiento que han trasladado al PSOE, "que no es una propuesta de máximos que pueda rebajarse", es un planteamiento "honesto y razonable". "Planteamos un plan gobierno común, que no ocurra lo que ha pasado en otras épocas de pactos, y los logros y errores tienen que ser compartidos, no podemos sufrir dos ayuntamientos". Asimismo, el documento habla de contar con un espacio de coordinación y control conjunto, "con comunicación y donde se pueda dinamizar y trabajar de forma honesta, clara y en positivo para la ciudad".
Con siete concejales cada bloque, tanto Ganemos e IU han reprochado que el PSOE entienda que el gobierno local "es suyo". "El PSOE —ha recalcado Ruiz-Berdejo— no puede entender el gobierno de Jerez como si fuera suyo, venimos de tú a tú para ver cómo entre los tres grupos le damos forma a ese nuevo gobierno, no venimos a reforzar al PSOE". Aquí, ha querido dejar claro que las propuestas van antes que el reparto de poder, por si alguien estuviera especulando con esa posibilidad. "Ponemos sobre la mesa un documento abierto de 133 medidas a trabajar en el caso de que fructificara de forma positiva el acuerdo. Desde luego, no son medidas que salen de la nada, están extraídas de los programas electorales de Ganemos e IU y hay margen para un entendimiento en base a lo programático, que para nosotros es lo más importante. Si no hubiera entendimiento en esto ese gobierno no sería posible".
En lo que respecta al exigente acuerdo de gobernabilidad ha explicado que nace, de un lado, "de la apuesta que hicimos hace dos años por un gobierno en minoría del PSOE"; y de otro, porque "entendemos que tenemos la responsabilidad de darle estabilidad y un gobierno sólido a esta ciudad para que pueda afrontar con garantías los restos que tiene por delante". "Si hubiese funcionado el gobierno del PSOE no nos veríamos en esta situación pero si nos vemos es porque no lo ha hecho", ha remachado. El caso es que ahora el ejecutivo socialista, según apuntan fuentes consultadas por este medio, entiende que no es tan urgente la alianza y da por hecho que ya ha pasado lo peor. Es más, insisten en negar un fracaso tan rotundo en su gestión como el que pintan sus hipotéticos socios, por lo que claudicar ante estas exigencias sería en la práctica reconocer casi dos años de trabajo político fallido.
En cualquier caso, Ganemos e IU tienen claro que quieren un proyecto político común "nuevo". "No venimos a un gobierno suyo. Venimos de igual a igual a trabajar en un nuevo gobierno, con el PSOE también. La propuesta no impone, es honesta y equilibrada, pero evidentemente cuando nos sentamos en una mesa lo hacemos desde el convencimiento de que tenemos que tener unas garantías para que el previsible acuerdo programático pueda ejecutarse y para ello tienen que cumplirse estos criterios", ha resaltado el portavoz de IU, quien ha reprobado que "ya hemos empezado con incumplimientos respecto de los propios plazos que nos marcamos; no vamos a estar eternamente mareando la perdiz y dilatar estos encuentros más allá de febrero no tiene sentido". A todo esto, ambos dirigentes políticos han anunciado que previamente a la rueda de prensa el gobierno municipal les ha citado para este viernes con el objetivo de seguir abordando las negociaciones: "Acudiremos y les explicaremos lo que os estamos explicando (por la prensa)".
En estas conversaciones, en las que también está presente la dirección del PSOE jerezano —una bicefalia entre lo institucional y lo orgánico de sobra conocida—, están marcadas por el mandato de la asamblea de Ganemos en noviembre pasado, en la que se pronunció a favor de explorar la opción de la alianza de gobierno pero sin Mamen Sánchez. En todo caso, Santiago Sánchez no ha sido tajante en su alocución en este asunto y ha dejado en manos de la asamblea de la agrupación de electores si se levantaría el veto o no, en función de los acuerdos que se adoptasen. "Esto es una primera fase, si el PSOE acepta lo que proponemos, seguiremos hablando. El PSOE sabe el mandato que tenemos de la asamblea pero, a pesar de ello, nos sentamos y hablamos. A la asamblea tenemos que llevarle una propuesta. Al igual que el PSOE lo decide su ejecutiva, nosotros tendremos que decidir en asamblea si aceptamos que Mamen Sánchez siga de alcaldesa si hay acuerdo". En todo caso, si las negociaciones finalmente se derrumban, tanto Ganemos e IU han avanzado que un salto fallido al gobierno local no sería óbice para que no sigan apoyando puntualmente al PSOE en cuestiones como la aprobación del Presupuesto municipal de 2017. "Los Presupuestos van más allá de la relación con el gobierno; si son positivos, los apoyaremos; y si no, pues no lo haremos, con independencia de cómo sigan estos contactos", ha ultimado el líder de IU.
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