Rafael Padilla, Francisco Domouso y Manuel Arcila dejan este órgano, que elegirá a sus nuevos miembros "consensuados entre los grupos políticos".
Rafael Padilla, el que hasta ahora era presidente; Francisco Domouso, director de Cáritas Diocesana; y Manuel Arcila, profesor de la Escuela Universitaria de la Universidad de Cádiz, dimiten y dejan así de formar parte del Consejo Social de la ciudad, un órgano que pone así fin a una etapa, ya que todos ellos, y también Lorenzo Amor, presidente la federación nacional de trabajadores autónomos (ATA), que lo dejó meses atrás, fueron nombrados por el anterior gobierno local del PP.
El Ayuntamiento asegura que ahora "por primera vez", los nuevos miembros del Consejo Local "serán consensuados entre los grupos políticos municipales", una propuesta que se llevará al pleno de diciembre. Con estas dimisiones, queda al frente de este órgano el vicepresidente Juan Núñez, uno de los representante de las entidades económicas y empresariales. La alcaldesa Mamen Sánchez ha presidido el Consejo Social de la Ciudad donde Intervención ha informado sobre las consecuencias y las noticias desfavorables que puede suponer para la ciudad la no aprobación del Presupuesto de 2016 en el pleno de este jueves.
Intervención ha desgranado las obligaciones específicas, como la creación de un fondo de contingencia o el pago de las amortizaciones de los fondo ICO (18 millones de euros), entre otras, que debe recoger en el Presupuesto; y ha expuesto el peligro que se cierne en el mantenimiento y equilibrio de los servicios municipales, así como sobre el futuro de varias empresas municipales y de la necesidad del traspaso de activos del Villamarta a una nueva fundación para su supervivencia. Unas obligaciones que sin presupuesto y sin planificación financiera no se pueden hacer, señala el gobierno local en una nota de prensa.
La falta de Presupuesto, traslada el ejecutivo socialista al Consejo Social, "puede desembocar en la intervención del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas". El gobierno local, explica Sánchez, “ante la nueva etapa del Consejo Social de la ciudad, desea dar un impulso a este organismo ciudadano para conseguir una mayor participación en los asuntos municipales de interés para el conjunto de la ciudadanía y facilitar que puedan llevarse a cabo las funciones que el Consejo tiene encomendadas”.
A nivel de funcionamiento interno, y mientras se produce el proceso de renovación, las comisiones del Consejo Social van a tener reuniones con los tenientes de alcaldesa para conocer los planes de empleo de la Junta, dotados con 5,3 millones, y para concretar las propuestas que se van a elevar al Gobierno central a cuenta de los 18,75 millones de los fondos europeos.