Los nombres de calles, avenidas y recintos públicos, hasta un estadio y dos puentes, han dado mucho juego en la ciudad de Cádiz durante los últimos diez años. Los nostálgicos, por un lado, y los que reivindican el derecho a la dignidad de las víctimas, en forma de leyes de memoria histórica, lo protagonizan.
Con la mayoría de los debates -que un tercer grupo de ciudadanos considera fútil- enquistados o ralentizados, dos iniciativas políticas reactivan la conversación pública interminable.
En la oposición municipal, el grupo Adelante Izquierda Gaditana vuelve a exigir al equipo de gobierno de Bruno García el acceso al expediente abierto para el, nuevo, cambio de nombre del estadio municipal Nuevo Mirandilla, que dejó de llamarse oficialmente Carranza en 2019.
La petición de información, con retintín, llega tras "cumplirse justo un año de que el alcalde anunciara su intención de volver a denominarlo con el apellido del represor y participante en el golpe de estado de 1936, Ramón de Carranza".
¿Dónde está el expediente?
Hace siete meses, afirma este grupo, el propio alcalde se comprmetió en pleno a mostrar los documentos que integran dicho expediente tanto a la oposición como a la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica de Cádiz y a la plataforma Carranza Incumple.
La concejala de AIG Vanessa Sibón denuncia ahora una "falta de transparencia total y absoluta por parte del alcalde con su ciudad", y recuerda que volver al nombre anterior sería "una vulneración flagrante de la Ley de Memoria Histórica, como han manifestado públicamente muchas voces, entre ellas, la del propio secretario de Estado de Memoria Democrática".
"Sospechamos que el gobierno local ya ha desistido de perpetrar ese capricho de la directiva del Cádiz Club de Fútbol"
La oposición recuerda el año transcurrido desde la sorprendente reaparición del debate para pedirle que "desista de ese procedimiento administrativo que supone, además de una gran falta de respeto hacia muchos gaditanos, una clara vulneración de la Ley de Memoria Democrática".
Sibón "sospecha que el gobierno local ya ha desistido de perpetrar ese capricho de la directiva del Cádiz Club de Fútbol porque se ha dado cuenta de que sus intenciones son contrarias a la Ley y de que ningún técnico municipal va a firmar esos informes con los que se pretende cometer una flagrante irregularidad".
Esta concejala cree que el alcalde, su equipo y los directivos del club de fútbol "no quieren reconocer públicamente que pretendían cometer una ilegalidad" por lo que "están dejando pasar el tiempo con el propósito de que nos olvidemos del tema".
Alberti reúne 4.000 firmas para el puente
Mientras un nombre parece caer en el olvido, otro reaparece en el recuerdo colectivo. Es del poeta portuense Rafael Alberti. El viejo puente sobre la Bahía de Cádiz, el primero inaugurado en 1969, el llamado José León de Carranza puede llevar pronto su nombre. El cambio parece ganar peso.
Sumar Cádiz, formación autora de la propuesta, adelantaba este miércoles que existe un "consenso total" con el Ministerio de Transporte para esta nueva denominación. "Puede que sea una realidad muy pronto", asegura en una nota pública la diputada Esther Gil de Reboleño.
La Subdelegación del Gobierno en Cádiz ha ratificado su apoyo a la denominación Rafael Alberti y confirma que la modificación administrativa está "muy avanzada".
"Nuestra ciudad merece que una de sus infraestructuras más emblemáticas lleve el nombre de quien llevó el nombre de Cádiz por el mundo con su poesía y su lucha por la libertad", defiende Gil de Reboleño. Su partido inició una "campaña popular" de apoyo a este cambio de nombre que lleva "casi 4.000 firmas recogidas".
Sumar agradece "el compromiso y la enorme implicación de tantas personas, colectivos, entidades culturales y ayuntamientos" que han hecho posible concretar este cambio, respaldado por la Ley de Memoria Democrática.
Esta modificación, según la parlamentaria, "salda una deuda con la ciudad, sustituyendo el nombre del actual puente, que honra a una figura del franquismo, por el de Rafael Alberti, poeta comprometido, exiliado por la dictadura y símbolo de la cultura republicana del siglo XX".
Los promotores de la idea y la recogida de firmas lamentan que el Ayuntamiento de Cádiz se haya mostrado indiferente a su propuesta: "Ha ignorado el deseo del pueblo, no se ha posicionado en un acto de movilización ciudadana".
