San Mateo vivió el pasado lunes un acto que cada año va alcanzando mayor participación. Tras el besamanos y besapies del domingo de los titulares de la cofradía, la hermandad programó el traslado del Señor de las Penas hasta su paso de salida procesional.
La convocatoria abarrotó el templo. Incluso se tuvo que abrir la puerta principal para que los que no pudieron acceder lo vieran desde el exterior. Lo cierto es que cada año esta cita va ganando en aceptación y asistencia tanto de hermanos como de cofrades en general.
Con la iglesia sin iluminación artificial, la imagen fue llevada en parihuela desde el altar mayor hasta donde se ubica el paso, ya preparado para el Martes Santo. El Señor de las Penas fue subido mediante una plataforma mecánica que lo elevó por encima del canasto del paso.
En ese silencio y con luz de cera, se desarrolló este momento que ya deja casi todo listo para la salida del Señor. En estos días de la semana de Pasión, varias son las hermandades que llevan a cabo traslados de sus titulares los pasos de salida procesional, como este jueves el del Cristo de las Esperanza de la Hermandad de la Vera Cruz, que en la década de los noventa del siglo pasado fue pionera en hacer público y solemne este tipo de traslados que hasta entonces se hacían a puerta cerrada.
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