El hombre era operario de la extinta Construcciones Aeronáuticas, empresa luego absorbida por Airbus, que es quien deberá hacer frente al pago de la indemnización, según ha informado Canal Sur.
Según la sentencia del Juzgado de lo Social nº 1 de Cádiz, queda probada la relación del fallecimiento de este trabajador con el contacto con la sustancia cancerígena.
El fallecido trabajó en unos hornos de la fábrica durante la década de los 80, lo que a la postre le provocó un cáncer diagnosticado en 2018, cuando ya se había jubilado. El trabajador murió en 2020.
El magistrado expone que la reparación "exigía bajar el horno, abrir su parte exterior, Sacar a paladas el amianto que se compactaba en los sacos en que se vertía y soldar las resistencias para, posteriormente, poner el horno en posición vertical e introducir polvo de amianto contenido en nuevos sacos.
La Asociación de Afectados por Amianto de la Bahía de Cádiz considera muy interesante este tipo de resoluciones porque impulsa la denuncia de los incumplimientos legislativos que se cometieron en las décadas de los años 70 y 80 en diferentes centros de trabajo.
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