Noelia Vera, número 1 de Podemos en la lista al Congreso por la provincia, habla en los desayunos de lavozdelsur.es de la importancia de la televisión para su formación y dice que ya el ‘caso Monedero’ “no hay quien se lo crea”.
Noelia Vera (El Puerto de Santa María, 1985), es periodista y lleva varios años viviendo en Madrid. Presentadora de La Tuerka –el canal de televisión creado por Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero, entre otros miembros de Podemos– y directora de contenidos de la formación morada, ahora se enfrenta a un gran reto: Representar a la provincia en el Congreso tras ir de número 1 en la lista por Cádiz.
¿Qué pensáis de quien dice que Podemos es “un producto de marketing político”?
Pensamos que Podemos es hijo de muchas cosas, una el 15-M, otra lo que se fraguó en la Universidad de Somosaguas en Madrid, otro de sus puntos de nacimiento fue La Tuerka, donde se hacía una clara apuesta por hacer comunicación política. Siempre hubo una apuesta muy fuerte por hacer política en televisión, porque era un espacio en el que no se nos dejaba entrar, ni en las grandes televisiones, ni en la TDT, así que Iglesias y Monedero decidieron crear un producto televisivo para tratar asuntos de política. Con lo cual, a partir de ahí, cuando empezamos a invitar a gente de muchas ideologías empiezan a acordarse de Pablo Iglesias cuando lo necesitan como tertuliano sobre asuntos como el 15-M, movimientos sociales… Ahí da el salto a televisión y resulta que empieza a poner voz a lo que mucha gente sentía y a ser una referencia en la comunicación política. Todavía no había nacido Podemos pero eso benefició. Siempre entendimos que para hacer corrientes mayoritarias había que estar en televisión.
Otra crítica recurrente que se os hace es la del cambio de discurso, desde hace unos meses ya no se habla de nacionalizar la banca, de impagar la deuda… ¿Todo por los votos?
Podemos se ha ido construyendo sobre la marcha, ha sido un proceso de aprendizaje grande. No tiene nada que ver cuando presentas un proyecto para entrar en el Parlamento Europeo que un proyecto de país que presentas para unas municipales o para las nacionales. Nuestros discursos se han adaptado a las necesidades. Hemos pasado por muchos momentos, en los que más que hablar de política teníamos que defendernos de una serie de ataques que venían desde fuera. Nuestro discurso ha cambiado según las necesidades y ahora hemos construido un proyecto de país que vamos a presentar el día 20 que favorece a las grandes mayorías de este país.
Sobre el 'caso Monedero': "Ha quedado totalmente demostrado que no hay quién se lo crea, recurrir continuamente a Venezuela no sirve para destruir a Podemos"
¿Qué queda del espíritu del 15-M en Podemos? ¿Hasta qué punto se ha querido frenar ese proceso de efervescencia que tenía la formación?
Del espíritu del 15-M nos queda todo y más. Tenemos siempre que tender a eso y que nunca se nos olvide que venimos del 15-M. No tiene dueño pero sí nos consideramos hijos y herederos de ese movimiento que supo poner sobre la mesa que somos mayoría, no somos de izquierda ni de derecha, y tenemos que poner la política al servicio de nosotros. Esa es la lectura clara que hizo Podemos y por eso consigue salir con esa fuerza. Y efectivamente, cuanta más fuerza cogió más miedo le daba a las grandes empresas y a los grandes intereses políticos y mediáticos que tenemos en este país. Estábamos enfrentándonos al poder, diciendo que para salir de la crisis no solo nos teníamos que apretar el cinturón, también deberían hacerlo ellos, que los privilegios se tenían que acabar, que la vida padre no era coherente con el discurso de austeridad que nos estaban intentando imponer. Tocábamos unas teclas molestas y no nos lo iban a poner fácil, por lo cual ahí entraron una serie de estrategias para ir bajándonos, y en cierto modo lo consiguieron. Eso no solo vino a través de los medios de comunicación sino de levantar otra cosa que luego se llamó Ciudadanos.
¿Cree que ha habido un intento de impulsar a Ciudadanos?
Pienso que sí. Podemos es una herramienta ciudadana nueva, Ciudadanos lleva muchos años funcionando y nos llama la atención cómo se ha desarrollado de una forma tan fácil. Ha tenido un cierto apoyo de los medios de comunicación y eso se notaba mucho en las entrevistas que le hacían a Albert Rivera o a Pablo Iglesias.
¿Se os ha hecho muy largo el año por casos como el de Monedero?
No se nos ha hecho largo porque hemos tenido que construir todo desde cero, hemos tenido además un año con muchas campañas electorales, prácticamente no nos ha dado tiempo a aburrirnos. Lo hemos construido desde cero con mucho esfuerzo de la gente, con los círculos, y ha sido un trabajo por el que todavía nos duele la espalda, de lo que ha sido y de lo que queda por delante. Hemos llegado hasta aquí mucho antes de lo que pensábamos. Casos como el de Monedero son otra estrategia más, creo que ha quedado totalmente demostrado que no hay quién se lo crea, recurrir continuamente a Venezuela no sirve para destruir a Podemos. Prueba de ello es que estamos a tres días de las elecciones y las encuestas no paran de subir, respiramos un clima de remontada. Hubo ataques, nos lo han puesto difícil, pero no nos han conseguido frenarnos.
Precisamente Monedero estuvo hace poco en Jerez y se le acusa de ser más cómico que político, de espectacularizar la política. ¿Qué opina sobre eso?
Al revés, a la política le falta un poquito de alegría y un poquito de frescura. Llevamos mucho tiempo viendo de los viejos partidos políticos un clima que no anima a que la gente quiera participar en los procesos políticos y se empodere, y no dejar así todas las decisiones en manos de los políticos, que es lo que ha pasado con la modificación del 135, con las reformas laborales, con todas las políticas de austeridad… Creo que gente como Juan Carlos Monedero es precisamente la que anima a que toda la gente quiera participar de la política y exijan que seamos parte de las decisiones que toman por nosotros. Monedero tiene una facilidad espectacular para comunicar y por eso se le quiere y se le respeta. Sabe combinar la inteligencia con el sentido del humor, con la humildad, con la honestidad y con el amor, que es una cosa que siempre dice. Al final la política es una cosa entre todos y no palabras que no pueda entender nadie.
¿Cómo acaba una periodista metida en política? ¿No teme que no la vean como imparcial cuando acabe su carrera política y trabaje en algún medio?
Lo que temo es seguir teniéndome que dedicar a otras cosas y no al periodismo porque la precariedad y la manipulación cada vez van a más. Pienso que había que dar un paso más allá. Me he dedicado siempre al periodismo de derechos humanos, al periodismo social, he estado mucho tiempo cubriendo el conflicto armado en Colombia, y cuando ves las historias de injusticia social, que realmente duelen, llega un momento en el que no sólo me quería limitar a contar la historia, sino que quería hacer algo por cambiarla. Creo que el periodismo y la comunicación son cosas distintas pero son una herramienta que también se puede poner a disposición del cambio social y político. Estamos en un momento de urgencia y de emergencia social que necesita que profesionales de diferentes sectores, también del periodismo, den un paso adelante y se dediquen a la política para solucionar esto. Nosotros no nos queremos dedicar a la política y máximo podemos estar ocho años en un cargo público, así que querré volver, pero ya no me interesa tanto que me quieran o no en un medio para hacer información pura y veraz. Los medios están muy contaminados, ahora mismo lo incoherente es decir que los medios de comunicación industriales son independientes. Hay muchas formas de trabajar por el periodismo y creo que tenemos la responsabilidad de ponerlo a favor de la justicia social.
"En Podemos no creemos en las etiquetas, porque creemos que tenemos que construir una mayoría social y eso pasa por hacer unas políticas de inclusión que creen mayoría"
¿A quién teme más el próximo domingo? ¿Quién os puede quitar más espacio?
Nosotros salimos a ganar claramente. Creo que tenemos posibilidades, miramos hacia atrás y casi cuesta creerse aún que personas como Ada Colau estén en el Ayuntamiento de Bacelona, Manuela (Carmena) en Madrid o ‘Kichi’ en Cádiz. Todos son adversarios políticos, aunque eso no quiere decir que sea algo negativo, sino que aspiramos a ganar. Nos hemos dado cuenta de que si quedamos por encima del PSOE tenemos más posibilidades de llevar a cabo los cambios, que es lo que hemos visto en los ayuntamientos, y esa es nuestra aspiración. En cuanto a IU-UP entendemos que ambos queremos salir de la crisis de una forma muy parecida, entendemos que quieren gobernar a favor del pueblo y en ese sentido siempre nos vamos a entender, pero sí que es cierto que hemos entendido que para salir de esta situación estábamos tomando caminos distintos. En Podemos no creemos en las etiquetas, porque creemos que tenemos que construir una mayoría social y eso pasa por hacer unas políticas de inclusión que creen mayoría. En definitiva, para nosotros sería un éxito quedar por encima del PSOE.
¿Es realizable el programa de Podemos? ¿Os salen las cuentas?
Claro. Tenemos unas medidas muy claras. Los niveles de desigualdad son impresionantes, los de pobreza y desempleo también, por lo que ante una situación de emergencia social tenemos que tomar medidas de emergencia. Tenemos que reactivar la capacidad de consumo de la gente. ¿Cómo lo hacemos? Incluyendo una renta básica de 600 euros al mes para las personas que no tienen ingresos. No solo tenemos un 37% de paro en la provincia, sino que además una gran parte son parados de larga duración que no tienen ingresos. Estos 600 euros se irán subiendo según el número de hijos o de la situación. Y hay que subir también el salario mínimo. Con 600 euros no se puede vivir y ya trabajar no te garantiza no ser pobre. Y a todas esas personas que no tienen un sueldo decente, completárselo con 900 euros. Ahí es donde nos preguntan cómo lo vamos a hacer. Los números salen perfectamente, en un primer punto recaudando todo lo que nos han robado; segundo con una lucha contra el fraude fiscal. Si conseguimos hacer esta derivación de los recursos, recuperaremos mucho de nuestro dinero. Por otro lado hay que hacer una reforma fiscal, pensamos que no hay nada de malo en tener una gran empresa y mucho dinero, pero hay que hacer un ejercicio de responsabilidad y que paguen en función de sus beneficios. Las clases populares han cargado sobre sus espaldas la mayor parte de la responsabilidad de la crisis. Vamos a revisar el IVA, lo vamos a subir a las grandes empresas y a la gente que consume productos de lujo. El IRPF también, no puede pagar lo mismo una persona que cobra 60.000 euros al año que una que cobra 300.000. Y por supuesto un impuesto de solidaridad, que es hacer que todas las entidades financieras que fueron rescatadas con el dinero de la gente empiecen a devolver lo que se les fue dando. Si hacemos todo eso tendremos dinero suficiente para lo que queremos hacer.
Es algo parecido a lo que propone UP-IU. ¿No puede provocar eso una fuga de capitales?
No, si miramos lo que ha pasado en países prósperos, en los que siempre nos reflejamos, vemos que los países menos desiguales y con menos pobreza son los más eficaces. Lo que hay que hacer es romper con esa pobreza reactivando la capacidad de consumo de la gente. Cuando nuestro país sea próspero y la gente viva de una forma digna, este país volverá a ser un foco de atracción de empresas que vengan de fuera. Solo hay que mirar cómo funcionan el resto de países en los que nos vemos reflejados. Cuanta menos desigualdad, mejor irá el país en todos los sentidos.
Pablo Iglesias dijo que si no gana las elecciones dejaría la política, ¿ahora lo veis igual?
Pablo no va a salir de la política en el momento que la gente lo elija como representante público. Él tiene clarísimo que no y evidentemente aspiramos a ganar y lo vamos a intentar porque pensamos que es lo mejor para el país. Si no ganamos, evidentemente no podemos bajar los ánimos, la moral, ni rendirnos. Si miramos para atrás, de lo que nadie podrá dudar es de que las cosas han cambiado políticamente en este país y ha sido gracias al esfuerzo de Podemos y la gente que lo compone. No, Pablo Iglesias no se va a ir si no gana.
¿Y si se fuera? ¿Podemos seguiría?
Claro que sí. Podemos son todas las personas que lo conforman. Podemos es toda la gente que está en las comunidades autónomas, todos los concejales que hemos conseguido en los ayuntamientos, los alcaldes que tenemos ya. Son muchas cosas, no solo Pablo Iglesias, aunque haya sido un buen líder y una buena persona que ha conseguido crear una fuerza de liderazgo que ha sido importante para hacer este ebullición que ha sido Podemos.
Esta entrevista ha sido realizada por Francisco Romero, María Luisa Parra, Paco Sánchez Múgica y Jorge Miró.
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