El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, ha valorado que en el proyecto de acuerdo para la reubicación de migrantes entre países de la Unión Europea "empiezan a latir los principios de solidaridad" y ha subrayado que se entiende "perfectamente" que España quede excluida de este futuro mecanismo de reparto.
Grande-Marlaska ha hecho esta afirmación tras la reunión del Consejo de Ministros y Asuntos de Interior de la Unión Europea (JAI) que ha tenido lugar este martes en Luxemburgo y en el que se ha debatido la declaración acordada el pasado 23 de septiembre entre Malta, Italia, Alemania y Francia para un posible reparto de los migrantes que lleguen por mar.
En concreto, el ministro del Interior en funciones ha explicado que el principio de acuerdo para la reubicación de migrantes que se ha debatido en la reunión excluye de los mecanismos de reparto a los países de primera entrada como España, Grecia, Italia, Chipre o Malta, según ha informado el Ministerio del Interior en un comunicado.
"Se entiende perfectamente que España no asuma reubicaciones", ha dicho Grande-Marlaska, quien ha destacado en la reunión que "España ya ha demostrado ser solidaria" y "responsable" al encargarse de los rescates y desembarcos en la fachada atlántica africana y en el Mediterráneo occidental, del control de las fronteras de Ceuta y Melilla y del refuerzo de la cooperación con los países de origen y tránsito.
Además, ha subrayado que apoyan la filosofía que late en el acuerdo. "Es un proyecto piloto que va a permitir que la política europea trascurra ya por un camino más acorde con los principios inspiradores de la Unión Europea", ha señalado antes de hacer referencia al artículo 80 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, que proclama el principio de "solidaridad y de reparto equitativo de la responsabilidad entre los Estados miembro".
Grande-Marlaska ha explicado que este proyecto de acuerdo "empieza en el Mediterráneo central pero no pierde la perspectiva de que la política migratoria tiene que ser única y de que el Mediterráneo es único".
En este sentido, ha defendido ante sus homólogos europeos que se debe "aspirar a una verdadera política común, global y estructural en materia de migración, fronteras y asilo", es decir, una política que "implique a todos los estados miembro", que se aplique "a todo el Mediterráneo y a la fachada atlántica africana" y que se proyecte "a medio y largo plazo".
Grande-Marlaska ha dicho además que "no se debe descuidar la dimensión exterior" en el fenómeno de la inmigración, y ha destacado, como en anteriores reuniones con sus homólogos europeos, la necesidad y buenos resultados de promover la cooperación con los países de origen y tránsito.
Así, ha citado el ejemplo de España a la hora de trabajar en favor de la cooperación con países como Marruecos, Argelia, Mauritania o Senegal. "Debemos invertir más en este ámbito y coordinarnos mejor y de manera más positiva con los países de origen y tránsito", ha indicado.
En la reunión del Consejo de Ministros y Asuntos de Interior de la Unión Europea también se han abordado otros asuntos como la seguridad y estabilidad en la zona de El Sahel o la mejora en la lucha contra el abuso y explotación sexual infantil, un ámbito en el que Grande-Marlaska ha hecho hincapié en la necesidad de "dar prioridad internacional a la búsqueda de los productores de los materiales, debido a la gravedad de sus delitos y al daño que pueden causar".
Los ministros europeos también han debatido sobre las nuevas tecnologías y su impacto en la seguridad interior. El ministro español en funciones ha reclamado "un enfoque coordinado entre los países de la Unión Europea" y ha señalado que España apoya la creación de un laboratorio de innovación en el seno de Europol "para posicionar a la agencia como centro de vanguardia e innovación en materia de seguridad" en relación con los retos y desafíos que plantean las nuevas tecnologías en este ámbito.
Comentarios