Un año y cuatro meses después de que el veterano productor Ricardo Pachón fuese destituto como director del Instituto Andaluz del Flamenco —puesto en el que se mantuvo apenas medio año y del que se fue entre críticas a los responsables políticos de la Junta—, la Consejería de Cultura y Patrimonio ha activado un nuevo concurso público para optar al puesto vacante desde entonces.
El BOJA del pasado viernes publicaba las nuevas bases para el puesto vinculado con la consejería que dirige políticamente Patricia del Pozo (PP) y en los mentideros flamencos no para ya de sonar un nombre como futurible: Cristóbal Ortega, licenciado en Geografía e Historia —Máster en Gestión Cultural en la especialidad de Música, Teatro y Danza, por la Universidad Complutense de Madrid—, manager flamenco y ex director de la Bienal de Flamenco que ya optó a la primera convocatoria pública para el puesto, aunque acabó retirándose del proceso en la recta final. Finalmente, se llevó Pachón el gato al agua.
"Propuse varias cosas, pero a todo me decían que no. Y yo me preguntaba ¿qué tengo que hacer? ¿estar calladito y no hacer nada? Fue muy frustrante. Tenía un buen sueldo, despacho... pero en mi hambre mando yo", declaró Pachón (Sevilla, 1937) en una entrevista en El Mundo a los pocos meses de su cese en el cargo.
El puesto es muy jugoso y podía perfectamente haber sido asignado a dedo, pero el ala PP de la Junta ha querido hacer bandera de una supuesta transparencia en un cargo directivo que siempre fue elegido a dedazo limpio en pasadas legislaturas. Aparte de concentrar mucho poder en el orbe flamenco andaluz, la dirección del IAF cuenta para este ejercicio con una retribución fija de 52.806,03 euros brutos anuales, y un variable en concepto de productividad vinculado a evaluación de desempeño y cumplimiento de objetivos de un máximo de 3.370,6 euros brutos anuales.
Voces del mundo del flamenco han cuestionado el cambio en los criterios de selección de aspirantes en el nuevo concurso, donde ahora prima contar con un máster o posgrado de Gestión Cultural y se suprime el apartado en el que se recogía la importancia para puntuar en el concurso de los "méritos de especial relevancia en materias de flamenco, consistentes en producciones, premios, publicaciones, ponencias, jornadas o similares". El puesto también tiene entre los méritos valorables "nivel de inglés B2 acreditado según Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCREL)". Y especifica que, en caso de no aportarse certificado acreditativo del nivel de inglés, "será valorado mediante una prueba previa a la fase de entrevista".
Con contrato indefinido tras periodo de prueba de seis meses, el nuevo director del IAF "ejercerá las tareas de dirección y administración de todos los programas y actividades de flamenco que se desarrollen en la Agencia (Andaluza de Instituciones Culturales, ese chiringuito al que el gobierno del cambio tampoco es capaz de meter mano), la coordinación e impulso de las políticas relacionadas con el flamenco, su conservación, difusión y recuperación, su integración en el mercado musical y consolidación como industria cultural, promoción del flamenco a nivel internacional, formación, investigación y aprovechamiento del flamenco como recurso turístico y educativo, producción de espectáculos y apoyo a festivales, y las medidas de apoyo para la promoción del tejido profesional y asociativo del flamenco".
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