Carmen Cariciolo, hasta el jueves portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Bormujos (Sevilla) ha dejado el partido al considerar que ya no le representa al actuar con designaciones "a dedo, autoritarismo y chiringuitos", además de amparar a cargos que proceden "de la ultraderecha".
A sus relaciones con el que ha sido su partido no han ayudado tampoco mucho el anuncio que hizo hace algo más de un mes, cuando dijo que se había casado con una inmigrante venezolana.
Cariciolo ha llegado a apuntar que desde el propio partido incluso llegaron a obligarle a dar entrevistas comentando que tenía el apoyo de Vox. Un respaldo que nunca existió y lo que recibió fueron presiones.
Además, las relaciones venían ya por mal camino desde que la ex de Vox denunciase hace unos meses las presuntas irregularidades en el uso de la tarjeta de crédito de la agrupación municipal por parte de su compañero Miguel Ángel Pereda.
Tras su renuncia a seguir en Vox, Cariciolo ha solicitado su declaración como edil no adscrita, extremo que espera se haga efectivo en el próximo pleno del Ayuntamiento de Bormujos, al objeto de "seguir trabajando" por la localidad desde dicha condición.
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