El mundo vive horas convulsas con la escalada bélica entre Israel e Irán. Y en medio de la guerra, el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jameneí, ha intensificado la tensión con una serie de publicaciones en la red social X, en diferentes idiomas. En persa escribió: “En nombre del noble Haidar, comienza la batalla”, haciendo alusión a Alí, figura central en el islam chiita. Con este mensaje, el dirigente vincula el conflicto actual con símbolos religiosos profundamente arraigados en la identidad del régimen iraní.
Tras seis días de fuego cruzado entre Irán e Israel, la tensión en Oriente Medio alcanza nuevas cotas con declaraciones de alto voltaje procedentes de Teherán. En inglés, Jameneí fue aún más directo en otra publicación: “Debemos dar una fuerte respuesta al régimen terrorista sionista. No mostraremos piedad a los sionistas”.
We must give a strong response to the terrorist Zionist regime.
— Khamenei.ir (@khamenei_ir) June 17, 2025
We will show the Zionists no mercy.
Irán está usando misiles hipersónicos
Por su parte, la televisión estatal iraní emitió anoche un mensaje de tono siniestro y apocalíptico: “Esta noche ocurrirá una gran sorpresa que el mundo recordará durante siglos”. La advertencia coincide con una nueva ola de ataques lanzados desde territorio iraní, entre ellos el uso de misiles hipersónicos Fattah. En una tercera publicación, el líder supremo iraní afirmó que "la República Islámica triunfará sobre el régimen sionista por la voluntad de Dios”, subrayando el componente ideológico y religioso que acompaña a la narrativa oficial iraní.
Desde Estados Unidos, el expresidente Donald Trump reaccionó con dureza. Exigió a Irán una “rendición incondicional” y afirmó conocer la ubicación exacta del líder supremo iraní. Si bien reconoció que, por ahora, no ha ordenado ninguna operación para su eliminación, dejó abierta la posibilidad de actuar en el futuro.
Mientras la comunidad internacional observa con preocupación, Oriente Medio se adentra en un escenario de consecuencias imprevisibles. Las palabras de Jameneí, unidas a las acciones militares sobre el terreno, perfilan un conflicto que podría extenderse más allá del ámbito bilateral, con implicaciones geopolíticas de gran alcance.
