Este viernes 19 de septiembre no fue un día cualquiera en el IES Al-Ándalus de Arahal, en Sevilla. El centro despidió a uno de sus pilares, Miguel Ruiz, que se ha jubilado tras más de tres décadas de entrega a la enseñanza. Y lo ha hecho, además, en una fecha muy especial: el día de su cumpleaños.
Miguel ha sido durante 34 años parte esencial del instituto, de los cuales 27 los ejerció como jefe de estudios y director. Su marcha supone el cierre de una etapa marcada por la vocación, la disciplina y, sobre todo, por una profunda pasión por la educación.
El homenaje a Miguel estuvo cargado de emoción. Alumnos y alumnas lo despidieron entre aplausos, con una tarta y una banda de felicitación. Entre abrazos y sonrisas, compartió ese último día rodeado de compañeros que lo consideran mucho más que un profesor: un referente.
No es la única despedida
No obstante, esta despedida no ha sido la única en el curso. Pocos días antes, también se retiró Esperanza Sancho, jefa de estudios y profesora reconocida por su implicación en cada proyecto del centro. Ambos dejan tras de sí un legado difícil de igualar.
“Miguel y Esperanza son historia viva de nuestra comunidad educativa”, subrayan desde el instituto. Sus colegas destacan que los dos son “ejemplos intachables de profesionalidad, dedicación y vocación por la docencia”.
A lo largo de sus trayectorias, han acumulado innumerables anécdotas, pero ninguna parece suficiente para reflejar la magnitud de sus carreras. “La historia de nuestro centro no sería la misma sin ellos”, reconocen, resaltando que siempre predicaron con la humildad y el ejemplo personal como principal método de enseñanza.
“Nos quedamos con los momentos y los aprendizajes compartidos. Aunque va a ser difícil llenar el hueco que dejáis, intentaremos hacerlo con todo lo que nos habéis enseñado”, expresaron desde el centro.
La jornada terminó con un mensaje claro: un “gracias infinitas” para quienes han marcado con su ejemplo la vida del instituto y de generaciones de estudiantes.
