Polémica oferta de trabajo. Un panadero, de identidad desconocida, ha sido sancionado con una multa de 7.500 euros por publicar plazas vacantes para su negocio de una forma "discriminatoria". Hace dos meses el hombre decidió aumentar su plantilla, sin embargo, descuidó la manera de emprender la búsqueda de nuevos trabajadores.
Lanzó dos ofertas diferentes, una que buscaba a "un maestro panadero" y otra a "dependientas". Ambas han sido consideradas "discriminatorias" por determinar el género. Así, el puesto de mayor responsabilidad va dirigido únicamente a hombres mientras que el trabajo de atención al público, a mujeres.
Inspección de Trabajo ha explicado que "el hecho de ser hombre o mujer resulta del todo irrelevante para el desarrollo de la actividad profesional indicada". En cambio, el panadero, según recoge ABC, no están de acuerdo con esta sanción y asegura que sus palabras han sido malinterpretadas ya que emplea a muchas mujerer en distintos puestos, de mayor y menor responsabilidad.
"Lo que pedíamos era el título de maestro pastelero, que seas hombre o seas mujer nos da absolutamente igual. Hay muchas más mujeres contratadas y, dentro de esas mujeres, hay maestras pasteleras, maestras chocolateras. Tenemos hombres y mujeres, nos es indiferente", se defiende el hombre, que ha presentado un recurso para disminuir la sanción ya que esta le podría poner "contra las cuerdas". Es Inspección de Trabajo quien tiene la última palabra.
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