La acusada le clavó el cuchillo y le tapó la boca y la nariz para asfixiarlo, pero recibió una patada del niño, que consiguió zafarse de ella y pedir auxilio a su tía
El individuo, de 19 años, se infiltró en la residencia principal de la monarca con una ballesta para, según un vídeo de 'The Sun', vengarse por una masacre de las tropas británicas cometida en 1919