La señera cofradía de San Telmo fue la primera en procesionar en la ciudad durante el periodo republicano, marcado por una creciente conflictividad entre anticlericales e Iglesia: "El clamor popular avisa que ha salido a la calle, la ovación y los vivas al 'mejón' de los 'nacíos' son imponentes (...) Ni la lluvia pudo deslucir"