Más de 60 autónomos del centro del municipio jerezano se reúnen para defender sus puestos de trabajo ante el cierre de las dos grandes firmas del Grupo Inditex.
Más de 60 autónomos del centro de Jerez se concentran en la plaza Doña Blanca para defender sus puestos de trabajo, para mantener la vida comercial y empresarial en el centro de Jerez, bajo el lema #Somosdelcentro. Tras el cierre momentáneo de sus negocios, a eso de las dos de la tarde, van llegando más y más comerciantes del centro. "No hemos traído ni bocadillos ni nada", dice uno de los autónomos al tiempo en que sus compañeros ríen. "Ahora sale el siguiente autobús", murmura otra. En pocos minutos se van formando mini grupos en función de las calles: Honda, Larga, Algarve, Esteve, Doña Blanca... Pero todos se reúnen en una fría tarde por un objetivo común, para "concienciar al municipio y a la provincia de que en el centro de Jerez hay muchísimo comercio, muchísimas empresas... Y que somos personas que estamos detrás de un escaparate que trabajamos y defendemos nuestros puestos de trabajo", expresa a lavozdelsur.es Nela García, presidenta de la Asociación Centro Comercial Abierto de Jerez (Acoje).
La estampida de Pull&Bear y Lefties del centro de Jerez ha removido con fuerza a los autónomos. No obstante, María José López, propietaria de Belleza Profesional recuerda que denuncian la situación que viven los comercios del casco histórico jerezano a diario: "Muchos medios estáis haciendo sangre ahora y yo llevo ocho años trabajando en el centro y nosotros hacemos cosas todos los meses, todos los días. No es que sea ahora, es de siempre". El número de autobuses junto con sus horarios y su mal estado, el ORA, la despoblación del centro, el estado de las casas de la zona y los precios desorbitados del alquiler de los locales, son los principales problemas que destacan y por los que exigen soluciones urgentes. 
"Lo de los autobuses es primordial y llevamos años reclamándolo", incide la presidenta de Acoje. "Los autobuses son de vergüenza. Están hechos un asco, parece que se van a caer a pedazos, si no te sale ardiendo...", denuncia Lola, comerciante de la tienda Fragancias. "Y el aparcamiento es malísimo. No puede ser que haya un aparcamiento que lo esté explotando una persona y encima el Ayuntamiento te cobre el ORA. ¿Qué pasa? Pues que la gente no viene. Todo el mundo quiere ir con el coche hasta la puerta de las tiendas", expone otra compañera. "También hay mucha desinformación. Por ejemplo, la festividad de la Noche Azul y Blanca se hace todos los años y hay gente que se entera a posteriori", añade la dueña de Belleza Profesional. "Vale, el centro se llena, pero porque es un sábado por la noche y está la hostelería. Porque la gente a comprar no, pero a comer y a beber sí. ¿Por qué no se hacen más cosas?", continúa.
"La gente a comprar no, pero a comer y a beber sí"
Tras el cierre de Mango y la próxima fuga de las dos grandes marcas del Grupo Inditex, hay otros comercios locales que también han echado el cerrojo, como es el caso de la papelería ubicada en calle Arcos, o la tienda de persianas que se encuentra frente a la Iglesia de La Coronación. "Lo que no sea vender alcohol, todo está cerrando", sentencia Santi, propietario de un taller de bicicletas. "Antes, los pueblos de la Sierra venían todos a comprar aquí, al centro de Jerez, ahora ya ni vienen; se va directamente al Área Sur. Y en los pueblos de la Sierra, en muchos, está prohibido el establecimiento de grandes superficies porque se carga el tejido productivo de los comercios locales y la gente tiene que emigrar. Y ese es el gran problema que ha tenido Jerez", asegura.
"Tenemos una zona comercial de un nivel bastante importante a nivel andaluz, otras localidades de la provincia ya quisieran tener el tejido comercial que nosotros tenemos. Y debemos estar orgullosos de ello, que la gente se de cuenta que comprando en el comercio local, sea en el centro o sea en tu barriada, se está favoreciendo a la economía local. Tenemos nuestra razón social en Jerez, no nos vamos a paraísos fiscales, no tenemos las cuentas en otros países...", concluye Nela García.
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