A mediados de marzo, la alcaldesa, María José García-Pelayo, compareció en un pleno extraordinario para dar explicaciones a los grupos de la oposición sobre su vinculación con la trama Gürtel. Lo hacía apenas dos semanas después de que viera la luz un informe de la Policía Judicial (UDEF) que así lo concluía. En dicha sesión plenaria la regidora popular trató de exculparse en esa presunta relación con el expediente de Fitur 2004, que recoge las contrataciones irregulares por parte del Ayuntamiento de Jerez con la red de Correa. Y se mostró dispuesta absolutamente a mostrar el expediente porque "no tenemos nada que ocultar". Ocho meses después de aquello, el expediente sigue sin hacerse público. "No solamente los políticos tienen acceso a ese expediente, sino que también todos los ciudadanos que quieran individualmente o formando parte de alguna asociación lo tienen a su disposición. No tenemos absolutamente nada, nada, nada que ocultar. Y queremos ser transparentes para que el ciudadano pueda comprobar que cuando decimos que no tenemos nada que ocultar es verdad que no tenemos absolutamente nada que ocultar”, prometió Pelayo a mediados de marzo pasado.
Hace unas semanas era IU la que volvía a reclamar insistentemente tener acceso al referido expediente. Y la regidora y senadora del PP como la que oye llover. El medio digital Vozopuli.com publicaba hace solo unos días, tras la dimisión de la ministra Ana Mato a raíz del último auto del juez Ruz, un artículo que titulaba Las ocho bombas del caso Gürtel que aún quedan por estallarle al PP. Entre ellas, menciona el artículo, 'la pieza jerezana'. Hasta comienzos de este año, escribe el autor de la información de este portal digital, "la trama Gürtel había pasado de puntillas por Andalucía. Sin embargo, el pasado mes de febrero la UDEF entregaba un informe en la Audiencia Nacional que daba pie a la apertura de una pieza específica sobre las actividades de la trama en esta comunidad y, más en concreto, en la localidad gaditana de Jerez de la Frontera". En dicho dossier de la Policía Judicial, de poco más de medio centenar de folios, los agentes detallaban supuestas irregularidades en tres contratos adjudicados por la entonces alcaldesa María José García-Pelayo a dos empresas de la organización de Francisco Correa.
Como se publicó a finales de julio pasado, el magistrado de la Audiencia Nacional, pendiente de saber si será relevado o no al frente de la instrucción, estaría metiendo prisa especialmente a la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) para contar cuanto antes con su valoración acerca de los documentos que, más allá del informe de la UDEF, realizó la anterior alcaldesa sobre las presuntas vinculaciones del Consistorio y la trama corrupta durante la anterior etapa del PP en la Alcaldía. Si la policía judicial ya dejaba clara en sus conclusiones la “implicación directa” tanto de Pelayo como de su por aquel entonces delegado de Promoción y teniente de alcalde, Bernardo Villar, ahora Ruz quiere nuevas valoraciones sobre el resto de documentación que se envió al TSJM y que el juez Pedreira archivó por desarrollarse los hechos “fundamentalmente en Andalucía”.
En una entrevista en Radio Jerez a principios de octubre pasado, la periodista de la SER, Ana Huguet, interrogaba a la alcaldesa, María José García-Pelayo, por su implicación con la Gürtel y ponía el acento en el hecho de que no hubiera puesto a disposición de toda la ciudadanía el expediente de Fitur 2004, tal y como se comprometió en aquel pleno extraordinario de marzo pasado. En aquella entrevista la alcaldesa mantenía: "Yo he dado mi expediente íntegro a quien se lo tenía que dar: a los jueces y a la presidenta de la Junta de Andalucía". A partir de aquí se inicia una especie de careo entre la periodista y la alcaldesa. La primera le cuestionaba: "Pero alcaldesa si fue usted la que anunció que iba a estar en secretaría". Y respondía Pelayo: "Lo que hice fue facilitárselo a la presidenta de la Junta... A lo que respondió la periodista: "Pero eso no es la secretaría del Ayuntamiento". Y zanjaba la también líder del PP jerezano visiblemente molesta: "Entiendo que cuando hay una causa judicial hay que ser prudente, entiendo que no hay que ocultarlo y por eso se lo trasladé a los jueces y se lo he trasladado a la secretaria general del PSOE. Insisto, comparecí en el pleno y lo expliqué. Y luego me dice usted que ¿tenía que estar en secretaría? Es que ha estado en secretaría durante mucho tiempo porque cuando nosotros tramitamos el expediente estuvo íntegramente en secretaría".
Sea como fuere, pese a su compromiso público por arrojar toda luz y taquígrafos a la investigación, el expediente no llegó a hacerse público nunca tras aquel pleno de hace ya ocho meses. Como último recurso para tratar de salir airosa de aquella entrevista en la SER, Pelayo concluyó afirmando: "Y sobre todo hay algo importante que me gustaría destacar, el expediente se tramitó y después se llevó al consejo del Instituto de Promoción de la Ciudad y todos los grupos políticos por unanimidad después de haber estudiado el expediente votaron a favor de esa contratación". Como ya publicó La Voz del Sur en marzo de este año, en contra de una de las justificaciones del PP para restar relevancia al informe de la UDEF que vincula a Pelayo con la Gürtel, un certificado del secretario ratifica que los consejeros del antiguo IPDC no aprobaron el ingente gasto, pues solo se les “dio cuenta” de las resoluciones de Presidencia efectuadas más de 60 días antes". Es importante subrayar la expresión “dar cuenta” en un consejo de administración, ya que ésta, en contra de las manifestaciones de la regidora del PP, no implica votación alguna de los miembros del consejo de administración, al igual que en los plenos municipales las comunicaciones tampoco tienen opción de voto y son puntos simplemente a título informativo.
De hecho, en aquel consejo de administración los miembros de la oposición sencillamente se ratificaron, es decir simple y llanamente se dieron por enterado. En todo caso, en aquella entrevista Pelayo insistía: "Es muy fácil ahora venir a decir no es que resulta que... ¿Qué yo he tenido la mala suerte de que la empresa era fulanita de tal que ahora está metida en la trama? Pues oiga usted, pues mala suerte que he tenido pero le puedo asegurar que hace diez años cuando se firmó ese contrato aquí nadie sabía absolutamente... Pero que le insisto que el expediente está en manos de quien tiene que estar". "¿Teme que la imputen?", preguntaba la periodista. Y mantenía lo dicho en reiteradas ocasiones: "En absoluto, de verdad se lo digo. A uno se le imputa cuando roba pero yo de verdad le digo... Es que una imputación ¿por qué? Yo a mí se me escapa, estoy absolutamente tranquila porque no he hecho absolutamente nada malo".
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